"Desgraciadamente este conflicto viene hace tiempo y no ha habido voluntad de solucionarlo del sector empresarial y del otro, para evitar una muerte", reflexionó el titular de la CGT en línea con su lectura de los hehcos de ayer.

Al ser consultado sobre las llamadas "patotas sindicales", enr eferencia a los integrantes del gremio de la Unión Ferroviaria y su posible vinculación con el ataque, Moyano dijo que "cuando se da una situación de estas (características) se aprovechan para hablar de cosas que tienen poco que ver con la realidad".

"No sé exactamente si son patotas sindicales o de otra naturaleza. Lo cierto es el hecho desgraciado de que tenemos que lamentar", asumió el jefe de la CGT y del gremio de Camioneros.

Moyano admitió, además, que "los sindicatos tendrían que cambiar", al igual que "la sociedad toda", que "ha entrado en un estado de degradación".

Por otra parte, Moyano insistió en vincular al ex presidente Eduardo Duhalde con el conflicto armado que dejó un muerto y tres heridos, uno de gravedad, como saldo, al deslizar que el ex mandatario pretende "instalar un clima de crispación".

Moyano repitió la versión de que Duhalde "estuvo reunido aparentemente con (el titular de la Unión Ferroviaria, José) Pedraza el día anterior" por lo que "eso trae alguna duda, evidentemente lleva a alguna confusión", pese a que se habría confirmado que la información que circuló ayer sobre el encuentro entre ambos dirigentes habría tenido lugar un año atrás.

Además, en declaraciones radiales recordó que "hace no mucho tiempo Duhalde había mencionado que el país iba camino al 2001, cuando la gente salió a las calles, entonces parecería que se quiere crear un clima apuntando a eso, parecería que está todo mal".

"Hay un ataque permanente, y todo lo que pasa se lo quieren adjudicar al Gobierno, quieren instalar en la sociedad la crispación", denunció Moyano. Al respecto, sostuvo que "si las cosas estuvieran tan mal, estaríamos como en Francia (donde se registran paros y graves incidentes), nosotros estaríamos en la calle, pero resulta que en el fin de semana largo se batieron todos los récords (de turismo y consumo), entonces ¿qué es lo que quieren hacer creer?", planteó.