El paro se levantó tras la convocatoria del gobierno porteño a una mesa de negociación, en la que se discutirán las últimas cesantías, despidos y sanciones contra los empleados en conflicto. Por la mañana el abogado de los trabajadores, Sebastián Alanís, había denunciado el envío de los "telegramas" a 41 músicos, que García Caffi defendió porque "no tocaban desde hace 6 meses".

La escalada de declaraciones cruzadas había llegado al punto que el propio jefe de gobierno, Mauricio Macri, respaldó la decisión de cesantear a los músicos y denunció que los sindicalistas eran "un grupo de personas que se sublevan, patotean, agreden y no dejan trabajar". El director del teatro, por su parte, había calificado a los huelguistas como "un grupo absolutamente pequeño de profesionales de la desacreditación, pero con una potencia extraordinaria y poder de fuego en los medios".

Finalmente el conflicto se encuazó tras el anuncio que realizó el director de Recursos Humanos porteño, Andrés Ibarra, quien convocó a las partes una reunión el próximo martes. En diálogo con DyN, Ibarra advirtió que "siempre estamos abiertos al diálogo" y aclaró que esperará la finalización "efectiva" de la medida de fuerza para iniciar una negociación: "Los contratos de los 41 músicos no se renovaron porque ellos no estaban tocando. Si vuelven a trabajar no va a haber ningún problema, porque las orquestas necesitan de los músicos", afirmó.