Con el alegato de la Secretaría de Derechos Humanos, el Tribunal Oral en lo Federal 5 empezó a escuchar la acusación contra el destituido capitán de la Armada Alfredo Astiz y su camarada de armas Jorge "Tigre" Acosta, junto a otra decena y media de represores que intervinieron en el operativo clandestino realizado el 8 de diciembre de 1977 donde fueron secuestradas las monjas francesas Leonie Duquet y Alice Domon y un grupo de Madres de Plaza de Mayo.

"En la República Argentina, a partir de 1975 no hubo ninguna guerra, ni dos bandos, ni dos demonios", expresó el abogado, y se preguntó "¿qué clase de peligrosos guerreros demoníacos eran las madres que buscaban a su hijos o dos religiosas que las ayudaban en esa búsqueda?. El letrado adelantó que pedirá penas de prisión para los marinos y prefectos sentados en el banquillo.

"¿Realmente estas personas eran terroristas, seres demoníacos digitados desde la URSS y Cuba pidiendo por sus familiares en una Iglesia?", ironizó Rico e insistió: "¿A esto se dedicaba la Inteligencia de la Marina?".

La querella enumeró a las víctimas "de la Iglesia de Santa Cruz", pues la mayoría fue secuestrada allí, y constituyeron el grupo fundador de lo que, con los años, llegarían a constituir las Madres de Plaza de Mayo. Azucena Villaflor de Devicenti, Esther Balestrino de Careaga, María Ponce de Bianco, Horacio Elbert, Angela Aguad, José Fondovila, Eduardo Horane, Raquel Bulit, Patricia Oviedo, Remo Berardo, más las monjas Alice Dommon y Leonie Duquet, recordó.

Rico enfatizó que pronunciaba el alegato "en nombre de los 30.000 desaparecidos y de todas las víctimas del terrorismo de Estado" así como de "todos los argentinos que desean verdad y justicia para dar vuelta la página más dolorosa de historia reciente".

Este juicio comenzó en diciembre de 2009 y se juzgan el secuestro y desaparición del periodista Rodolfo Walsh, de las monjas francesas Alice Domon y Leonie Duquet y los casos de otras 82 víctimas que estuvieron secuestradas en la ESMA. Por esos hechos están acusados 17 represores, entre ellos el canciller de la dictadura Oscar Montes, Adolfo Donda, Antonio Pernías, Jorge Radice, Juan Carlos Rolón, Carlos Capdevilla y Ricardo Miguel Cavallo. Todos ellos pertenecieron al Grupo de Tareas 3.3.2 que estaba a cargo de los secuestros, mientras Acosta era el jefe de inteligencia de la ESMA.