Un día después de que el Centro de Estudios Legales y Sociales denunciara una "criminología mediática que comienza por la condena y no se sostiene en la comprobación de un delito sino en la denuncia pública indeterminada", el propio Zaffaroni alertó acerca de una "nueva investigación" sobre sus bienes y denunció al Gafi (Grupo de Acción Financiera Internacional), "un organismo de presión internacional, que garantiza que el lavado de dinero se realiza en el hemisferio Norte". Todo esto, agregó, "no es una cuestión de la Corte".

El juez denunció que en los próximos días podría ser objeto de una nueva campaña de difamación, luego de haber recibido una llamada telefónica del banco suizo donde "tengo una cuenta desde hace 25 años, a mi nombre y con mi documento", que me comunicó que "como yo era una persona con mucha exposición pública, el banco no estaba interesado en mantener la cuenta". "Como resultado de eso he decidido transferir la cuenta al país. Desde hace 8 años tiene 40.000 dólares juntados a lo largo de muchos años, y no ha tenido movimientos significativos, salvo 70.000 dólares que me transfirió la Academia Sueca de Criminología por el Premio Mundial de Criminología 2009. (...) No he sacado dinero del país en ningún momento, estoy trayéndolo, legalmente y con los controles respectivos", enfatizó Zaffaroni.