El nivel general del índice de precios al consumidor que incluye bienes y servicios que consumen todos los estratos sociales sufrió en julio un alza de 9,7 por ciento en forma interanual.

Con estos números resultado de julio, el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) -que mide la indigencia- se ubicó en 603,35 pesos para una familia tipo. De esta forma, la CBA subió 1,2 por ciento respecto de junio, 0,4 puntos más que el índice general.

Desde enero, la CBA aumentó 4,28 por ciento y sumó 11,8 por ciento en la medición interanual. A su vez, la Canasta Básica Total (CBT), con la cual se marca la línea de la pobreza, alcanzó un valor de 1.331,49 pesos para un matrimonio y dos hijos. En los primeros siete meses, la CBT subió 6,3 por ciento, para alcanzar el 13,33 por ciento en doce meses.

La CBA consta de un conjunto de alimentos básicos para la subsistencia familiar, mientras que la CBT le agrega servicios esenciales. La marcada diferencia entre las subas de las canastas y del índice general (1,2 y 1,3 por ciento frente a 0,8) responde a que los bienes aumentaron 1 por ciento y los servicios 0,5 por ciento.

Dentro de los bienes, la mayor incidencia se da en los alimentos, que aumentaron 0,8 por ciento con avances de 1,7 por ciento en verduras, 1,5 por ciento en frutas, 1,2 por ciento en bebidas y 1,1 por ciento en panificados.

A su vez, aceites y grasas, y los productos lácteos y huevos, exhibieron un incremento de 0,8 por ciento.