La periodista francesa, de 32 años, presentó en julio la denuncia ante la Fiscalía y lo acusó de intento de violación, por hechos producidos en febrero de 2003 en un apartamento parisino. La justicia remarcó, al momento de archivar la causa, que el delito de intento de violación prescribe al cabo de ocho años, en cambio el de agresión sexual, prescribe al cabo de tres.

Banon ya había anticipado que si la Fiscalía decidía archivar su denuncia, inmediatamente presentaría una demanda en lo civil, lo que supone automáticamente la designación de un juez de instrucción. El 29 de septiembre pasado, horas después de protagonizar un careo ante la policía al que también asistió Strauss-Kahn, Banon afirmó por televisión que "sí, hubo intento de violación".

Según una fuente cercana a las investigaciones, dos semanas antes, y durante un interrogatorio individual por los agentes de la Brigada de Represión de la Delincuencia contra la Persona (BRDP) encargados de verificar la denuncia de Banon, Strauss-Kahn reconoció que había intentado "seducir" a la joven.

Banon fue interrogada por la policía el 11 de julio. Strauss-Kahn dijo que la versión de los hechos dada por la muchacha es "imaginaria" y la demandó por "denuncia calumniosa". La otra opción de la Fiscalía francesa era abrir un sumario a cargo de un juez de instrucción.

Strauss-Kahn, visto públicamente el domingo cuando fue a votar en las primarias socialistas, volvió a Francia a principios de septiembre, cuatro meses después de ser acusado en Nueva York de violación de una mucama de un lujoso hotel de esa ciudad, la guineana Nafissatou Diallo, de 32 años.

Esa acusación y su inmediata detención, pusieron fin a sus aspiraciones a las elecciones presidenciales francesas de 2012 de cara a las cuales era gran favorito socialista frente al conservador Nicolas Sarkozy.

Ahora, que la Fiscalía neoyorquina retiró todos los cargos que pesaban en su contra el 23 de agosto, aunque la mucama guineana lo demandó en lo civil, y algo similar está por ocurrir en París, los primarias socialistas ya pasaron su primera vuelta el domingo pasado y Strauss-Kahn quedó en el camino.