"Es obviamente preocupante que mientras estamos desplegando observadores (de la ONU) las armas del régimen de (Bashar) Al Assad están disparando nuevamente en Homs, Idlib y en otros lugares, y los sirios continúan muriendo", dijo Clinton, para quien la situación en ese país está "en un crucial punto de inflexión".

Asimismo, sostuvo que tanto su país como los miembros de la OTAN "juzgaremos al régimen de Al Assad por sus acciones, no por sus palabras (...) O tendremos éxito con el plan de (el mediador de paz de la ONU) Kofi Annan o veremos a Al Assad desperdiciando su última oportunidad". Es que tras semanas de negociaciones, el 10 de abril entró en vigor un plan de paz de seis puntos presentado por el extitular de la ONU al régimen sirio y a la oposición armada, que ambas partes se acusan de violar.

El documento incluye la retirada de las tropas sirias de las calles, condición que Al Asaad rechazó. De hecho, las organizaciones de derechos humanos denunciaron que el Ejército reanudó e intensificó los bombardeos y la represión en diferentes partes del país, sobre todo en Homs e Idleb, cabeceras de la oposición.

Como segundo punto de preocupación, Clinton mostró la inquietud de que el conflicto no solo se desarrolle a las puertas de Turquía, sino que además comience a afectarla. "Este conflicto tiene lugar justo en la frontera de la OTAN. Vimos la semana pasada un bombardeo en la frontera de Turquía. Nuestro aliado ya ha sufrido el efecto no sólo de los refugiados, sino dos muertes en su territorio", remarcó.