Además, Caligari sostuvo que la paralización del servicio iniciada ayer sucedió luego de "seis meses de negociaciones" con los empresarios y destacó que la normalización de los viajes dependerá de la operatividad de las empresas, porque, desde la UTA, "el paro ya está levantado". "La garantía (para que se cumpla el acuerdo) está dada por la resolución del Ministerio de Trabajo. A nadie le gusta ver a los pasajeros parados", agregó.

En tanto, la viceministra de Trabajo, Noemí Rial, y el secretario de Transporte, Alejandro Ramos, ratificaron la propuesta salarial a través de la resolución 1058, que sostiene que "estaban ya acordados los puntos sustantivos que fueron materia de negociación", por lo que "los pagos de 700 pesos para enero, febrero y marzo y los otros 1.000 pesos para abril, mayo y junio serán remunerativos a todos sus efectos y conforme con la ley".

Rial y Ramos instaron a la Unión Tranviarios Automotor (UTA), que lidera Roberto Fernández, a levantar las medidas de acción directa que afectan los servicios de larga distancia "de forma inmediata y bajo apercibimiento de aplicar sanciones"; y exhortaron a las empresas representadas por las cámaras a poner a disposición "las instalaciones y vehículos para el inmediato restablecimiento de los servicios bajo apercibimiento de aplicarles la máxima sanción prevista por esa no prestación".

En tanto, por la mañana, el subgerente de Fiscalización de la CNRT, Alejandro Rusconi, señaló que la entidad recabó toda la información sobre los servicios incumplidos para aplicar sanciones contra las empresas y apuntó sobre la "responsabilidad del sector patronal".

"No se puede dejar parada a la gente en todo el país. Si hay una diferencia salarial y no hay acuerdo la que tiene que acomodar la situación salarial es la patronal", criticó Rusconi, quien también advirtió que recaerá una sanción sobre la concesionaria de la terminal de Retiro.