Pianelli destacó que en el último año dos trabajadores del subte murieron por malas condiciones laborales y resaltó que el gobierno porteño y la empresa Roggio, titular de Metrovías, "saben que los reclamos son por las cosas mínimas", por lo que insistió: "Tratamos de garantizar las cosas mínimias para volver a nuestras casas, por eso nos empecinamos en que nuestros compañeros no se resingnen". "Nosotros no negociamos la vida de nuestros compañeros", apuntó el sindicalista contra la UTA.

Además, el titular del AGTSyP solicitó: "No transformen el conflicto gremial en algo político", en referencia a los dichos del jefe comunal, quien tildó de kirchneristas a los delegados. En ese sentido, Segovia destacó la militancia política de cada trabajador, pero apuntó que "en el sindicato hay independencia y el único objetivo de los trabajadores es conseguir el aumento salarial del 28 por ciento y la mejora en las condiciones".

En ese sentido, Pianelli recordó que el viernes por la tarde el conflicto "parecía solucionado, pero luego apareció una mano negra, un acuerdo que es un paga dios", en referencia a una quinta columna del acta preacordada en la que aparecía el acuerdo de 23 por ciento de aumento salarial acordado por la UTA con Metrovías. "Si a Roggio no le es rentable el subte, que se corra y que se haga cargo Sbase", apuntó Pianelli en un nuevo reclamo para que la empresa estatal del gobierno porteño tome el control del subte.

Con el preacuerdo del viernes por la tarde en mano, Pianelli indicó que van a esperar "hasta las 24 para firmarlo, vamos a esperar un llamado y poder mañana volver a la vida normal y que haya subtes". "Está en manos de ustedes si lo quieren resolver y si no háganse cargo", lanzó Segovia y agregó: "A Macri le conviene este conflicto".

En cuanto a la multa millonaria aplicada por la gestión macrista a los metrodelegados, Segovia apuntó: "¿Cuando la empresa Metrovias recibió una multa por dejar a la gente con menos vagones? No me sorprende porque Macri es parte de la patronal".

Más temprano, el titular de la UTA aseguró que en el conflicto del subte "el gobierno de la Ciudad puede dictar la conciliación obligatoria porque tiene sus leyes" y señaló que "la gente está preparada para ir trabajar", pero que los subtes "no arrancan porque estos compañeros los han tomado", en referencia a los metrodelegados. Además, mantuvo la actitud de denuncia contra los metrodelegados al indicar que "la representación gremial en el subte es de la UTA, que es un sindicato", y que según la ley los metrodelgados "no pueden hacer paro".

Por su parte, Macri volvió a desprenderse de la responsabilidad de controlar el subte porteño: "Cuando tenga capacidad de decirle a la gente `acá tengo un plan, que en este tiempo voy a poner el subterráneo en un estándar de seguridad internacional y va a poder operar`, ahí vamos a poder empezar una tarea, como hicimos con el Maldonado (arroyo), que va a llevar tres o cuatro años".

Asimismo, Macri justificó el aumento del subte en que "queremos hacernos cargo" del servicio, pero "no tenemos una caja de 400 millones de pesos disponible para gastar en lo que queramos". Y repitió que la huelga "es un tema cien por cien político".