Miles de partidarios del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) marcharon por Caracas llevando camisetas rojas y agitando banderas y afiches del mandatario Hugo Chávez, quien convalece en La Habana de la operación por cáncer a la que se sometió el 11 de diciembre. Los organizadores bautizaron a la manifestación como "La toma de Caracas" y aseguraron que el pueblo "no volverá a ser traicionado". La movilización fue masiva, aunque no alcanzó la gran convocatoria del 10 de enero pasado.

Según el oficialismo, tras la caída de la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez, el 23 de enero de 1958, el pueblo fue "traicionado" por los partidos Acción Democrática (AD) y el socialcristiano Copei, que se alternaron en el poder durante 40 años, apoyados en un pacto de gobernabilidad. "El pueblo tuvo gran esperanza, pero fue traicionado por un pacto que se hizo en Nueva York y que luego fue refrendado aquí por los partidos que traicionaron al pueblo y los empresarios y el imperialismo le dieron su bendición", expresó el vicepresidente Nicolás Maduro mientras marchaba en el medio de la marea roja.

Luego, en su discurso, Maduro anunció que viajará este miércoles a Cuba, donde se encuentra hospitalizado el mandatario Hugo Chávez. "Rafael Ramirez (ministro de Petróleo) y yo vamos a salir a La Habana a llevar al comandante el amor y el saludo del pueblo", dijo. "Aquí hay un pueblo que grita a todo pulmón: ¡Todos somos Chávez! ¡Todos somos Chávez!", arengó a las decenas de miles de personas que se congregaron en el populoso barrio 23 de Enero. Informó que en los últimos días el mandatario "ha logrado remontar la cuesta de un postoperatorio muy duro y difícil y ya va transitando el camino para una nueva etapa".

El vicepresidente explicó que luego de su visita a Cuba irá a Santiago de Chile junto al canciller Elías Jaua, quien se encuentra en La Habana, para participar en la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y la Unión Europea (UE). "Nosotros vamos con un conjunto de temas y consultas para tomar decisiones y luego, junto con Jaua, vamos a representar a Venezuela en la cumbre del Celac, el sábado y domingo, y llevamos al pueblo de Salvador Allende, de Pablo Neruda y Víctor Jara el saludo del pueblo de Simón Bolívar", manifestó.

Además, Maduro denunció que un grupo armado se infiltró en el país para atentar contra su vida y contra la del jefe de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello. "Tenemos ya algunas semanas haciendo seguimiento de un grupo que se infiltró en el país y tiene como objetivo atentar contra la vida de Diosdado y contra mi vida. Por eso es que ellos han dicho que nos estamos peleando", señaló. Agregó que la "jugada macabra y criminal es tratar de atentar contra la vida de cualquiera de nosotros y luego echarle la culpa al otro".

"Ellos dicen que hay que tratar de sacar del medio al tenientico (Cabello) y al chofer de autobús", indicó el vicepresidente, quien dijo estar "honrado" de haber sido un trabajador del Metro de Caracas como chofer de sus autobuses. En ese sentido, pidió al país que no se sorprenda "con las acciones que se tomen en los próximos días" para contener a los "criminales que se infiltraron en nuestro país". Advirtió que "quien se equivoque y viole la Constitución" irá preso, pues el gobierno tendrá "mano dura contra la conspiración de la derecha".

Mientras, la alianza opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) realizó una concentración en un estadio techado del este de Caracas, en la cual participaron los dirigentes de los partidos políticos que conforman el grupo. La MUD presentó un manifiesto por la conmemoración de los 55 años de la caída de la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez en el cual hizo un llamado a la unidad y al respeto a la Constitución.

"La verdad y la Constitución son las dos herramientas que necesitamos para salir de esta situación. El 23 de enero celebramos la unidad nacional", señaló el secretario ejecutivo de la MUD, Ramón Guillermo Aveledo, quien fue el único orador ante unas las casi mil personas que se congregaron en el gimnasio del Parque Miranda. "En vez de admitir la obvia, la evidente ausencia temporal del presidente, insisten en la mentira de que está en pleno ejercicio de sus funciones y se recurre a una sentencia que es una burla (...) para dar legalidad aparente a la usurpación" y dejar el poder "en manos de funcionarios no electos", dice el documento leído por Aveledo.

En el acto participó el ex candidato presidencial y gobernador del estado de Miranda, Henrique Capriles Radonski. La MUD adelantó que "si se precipitara" la convocatoria a nuevas elecciones presidenciales, elegirán "por la vía del consenso" a "un candidato unitario" para que enfrente a Maduro, elegido por Chávez como candidato oficialista en ese supuesto. Una vez que Aveledo leyó ese pasaje del manifiesto, los cientos de asistentes al acto opositor corearon el nombre de Capriles.