La aprobación del proyecto de ley que propone pagarle a los estatales los días no trabajados tuvo 407 votos a favor y ninguno en contra, lo cual es interpretado como una primera señal de un acuerdo bipartidista entre demócratas y republicanos. De hecho, su tratamiento tuvo el apoyo de la sección de Presupuesto de la Casa Blanca. No obstante, aún resta su tratamiento en el Senado.

En tanto, el presidente Obama calificó de "farsa" a la actitud que mantiene el Congreso de no aprobar un presupuesto y le pidió que "pongan fin" al cierre del gobierno, denominado "shutdown". "Detengan esta farsa", insistió el mandatario a través de un mensaje de video difundido en Washington.

La paralización "desconsiderada y perjudicial" de la administración pública debe terminar", señaló el mandatario y citó dos de las "más de 30 mil desgarradoras" cartas que le enviaron varios estadounidenses molestos con el cierre del gobierno. "Estoy muy preocupada por el bienestar de estos niños", escribió, por ejemplo, una maestra y madre de tres niños del estado de Alabama, según dijo el presidente.

Por su parte, el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, aseguró durante el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), en la isla indonesia de Bali, que el actual cierre de la administración estadounidense que obligó a cancelar la gira de Obama a Asia, no significa una disminución del compromiso de Washington con ese continente.

Kerry describió la crisis política y el bloqueo en el Congreso como un "momento de estupidez" que terminará pronto. "No confundan este episodio momentáneo como algo más que un momento de la política", dijo y enfatizó que "nada disminuirá nuestro compromiso con Asia y continuaremos cumpliendo nuestras responsabilidades y nuestro compromiso en todo el mundo", señaló.

Mañana se cumplen seis días del cierre administrativo y no se vislumbra ninguna solución a corto plazo. Las partes enfrentadas no están negociando y se limitan a acusarse mutuamente de la crisis. Los republicanos condicionan la aprobación del presupuesto al aplazamiento de la fecha para la entrada en vigor de la reforma sanitaria. Obama no está dispuesto a aceptar esa demanda te que afecta a la principal ley social de su gobierno.