En una carta fechada el 8 de noviembre y publicada hoy en su página web, el Consejo aseguró al jefe del CI (un órgano judicial) ruso, Alexandr Bastrikin, que "muchos de los miembros del Consejo expresaron su disposición de servir de aval de los imputados". La entidad representante del Kremlin argumentó su petición con el hecho de que el pasado 23 de octubre los órganos de instrucción rebajaron los cargos contra los tripulantes del "Arctic Sunrise" de "piratería" a "vandalismo", delito este último que no necesariamente se sanciona con pena de prisión.

Ayer, el CI anunció el traslado de los 30 imputados (entre ellos los argentinos Camila Speziale y Hernán Pérez Orsi.) de un penal del puerto ártico de Múrmansk a centros de prisión preventiva de San Petersburgo, la segunda ciudad de Rusia y explicó que la decisión fue adoptada en vista de que los delitos que se les imputan a los detenidos no entran en la jurisdicción del tribunal de Múrmansk.

Los imputados, 28 activistas de Greenpeace, más un cámara y un fotógrafo independientes fueron detenidos el 19 de septiembre por guardacostas rusos, cuando intentaban realizar una protesta por la extracción de crudo en el

Ártico. Greenpeace declaró que recurrirá la acusación de "vandalismo", que calificó de "igual de absurda" que la de piratería, "ya que los activistas no cometieron ningún acto que violara gravemente el orden público".