Todos los futbolistas de la plantilla actual del club azulgrana y el cuerpo técnico del entrenador argentino Gerardo Martino acudieron a firmar en el obituario situado en las instalaciones del estadio para rendir tributo y dar muestras de su apoyo a la familia de Vilanova. Hubo un rezo de Dani Alves y lágrimas en los rostros de Andrés Iniesta.

El Barcelona habilitó una sala de condolencias por la que ya pasaron centenares de hinchas azulgranas. Vilanova murió en la tarde del viernes a los 45 años, víctima de un cáncer de la glándula parótida contra el que luchó durante dos años y medio.

Vilanova fue el ayudante de Josep Guardiola en la etapa más gloriosa de la historia del Barcelona y luego se convirtió en primer entrenador del equipo en la temporada 2012/13, con el que consiguió el título de la Liga Española.

Guardiola, actual entrenador del Bayern Múnich, lamentó "profundamente" la muerte de su antiguo ayudante: "Quiero enviar un recuerdo a su padre Joaquim, a su madre María Rosa, a su mujer Montse, a su hija Carlota, a su hijo Adrià de parte de mis padres, de mi familia, de mis hermanos", dijo en la rueda de prensa tras la goleada de 5-2 del club alemán al Werder Bremen.

"Éramos muy jóvenes Tito y yo, nos queríamos comer el mundo y nos lo comimos. Ha sido una experiencia vital compartir tantas cosas con él", expresó sobre el compañero con el que conquistó los mayores éxitos del Barcelona. "Esta tristeza que hoy siento me acompañará toda la vida. Será imposible sacármela", añadió.