Los empleados se concentraron antes de las 6 en el cantero que separa la colectora y la traza principal en el kilómetro 31 y media hora después comenzaron a realizar un piquete sobre cuatro carriles de la autopista, tanto en sentido norte como hacia la Ciudad de Buenos Aires. Minutos después de las 8.30 decidieron levantar el corte y trasladarlo a la puerta de la empresa con el objetivo de insistir en el ingreso de los 28 trabajadores despedidos hace seis meses.

La Sala X de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo ordenó el miércoles "disponer que Industria Lear de Argentina deberá proceder a la inmediata reinstalación", bajo apercibimiento "de disponer su ejecución mediante solicitud al Ministerio de Trabajo”.

“Nuestros abogados notificaron a la empresa y al Ministerio de Trabajo de la resolución judicial, exigiéndoles la inmediata reincorporación de los trabajadores, pero no hemos obtenido ninguna confirmación sobre cuándo será efectivizada”, afirmó el delegado Rubén Matu.

“Los despedidos realizamos una nueva asamblea que resolvió rechazar las maniobras dilatorias que impidan el cumplimiento del fallo”, dijo el gremialista y añadió que por esa razón se realizará “una nueva jornada de lucha frente a las puertas de Lear en Pacheco”. “Una vez más nos movilizaremos y haremos distintas acciones de lucha para lograr la reincorporación y pasar una Navidad sin familias en la calle”, manifestó.

Por su parte, el Jefe de Gabinete Jorge Capitanich calificó hoy como "político e ideológico" el conflicto. “La empresa ha propiciado una negociación con los trabajadores que fueron despedidos, ha habido 20 trabajadores que aceptaron un acuerdo y recibieron su indemnización, pero otros no lo aceptaron y son los que están interfiriendo en la producción y la generación de trabajo”, dijo el jefe de ministros en su habitual conferencia brindada en Casa de Gobierno.

“No es un problema de producción de la empresa, además Lear es sólo una de las terminales que tiene el país. Lo que produce la planta satisface una parte de la demanda de la industria, con lo cual si no producen generan que uno tenga que comprar en otros países lo que se puede hacer acá”, afirmó. Agregó además que la protesta “demora los planes de inversión, el abastecimiento de la demanda local y hace que haya que importar más bienes”.