Chávez quedará detenido en la cárcel pública de Palmasola, en Santa Cruz de la Sierra, de acuerdo a lo que se ordenó tras una audiencia de 13 horas, desarrollada entre lunes y martes. También se ordenó el arresto domiciliario para Alberto Lozada, secretario ejecutivo de la federación boliviana y miembro del Comité de Disciplina de la Conmebol.

El dirigente es acusado de corrupción, asociación delictiva y estafa agravada, al igual que Lozada, su principal colaborador. Entre las acusaciones que cargan ambos está la de "estafa con víctimas múltiples" por la organización de un amistoso entre las selecciones de Bolivia y Brasil, en 2013.

El tesorero de la federación boliviana, Walter Zuleta, denunció a Chávez y Lozada por no entregar el dinero recaudado (500 mil dólares) a familiares del niño Kevin Beltrán, muerto el 20 de febrero de 2013 por una bengala disparada por seguidores del club brasileño Corinthians en el estadio de la ciudad boliviana de Oruro, durante un partido por Copa Libertadores.

Chávez y Lozada sostienen, en su defensa, que el juego Bolivia-Brasil fue pactado mucho antes del fatal episodio. El dirigente boliviano estará detenido hasta que concluya el juicio iniciado por una comisión de fiscales por orden del Ministerio Público, de Bolivia.

La justicia de Bolivia investigó a más de 20 dirigentes del fútbollocal en los últimos dos meses tras el escándalo de corrupción que sacudió a la FIFA y a la Conmebol.