El presidente de la campaña de Donald Trump, Paul Manafort, envuelto en un escándalo por sus lazos con Ucrania y Rusia, renunció a su cargo tras el enroque de la víspera que posicionó a Stephen Bannon, exbanquero de Goldman Sachs y presidente ejecutivo del sitio ultraconservador Breitbart Newsal, como jefe ejecutivo, y a Kellyanne Conway, encuestadora republicana de larga trayectoria, como directora del equipo, cambio que le restó poder dentro de la mesa chica del candidato.

"Esta mañana, Manafort ofreció su dimisión de nuestra campaña, y la acepté", explicó Trump a través de un comunicado, en el que agradeció a su excolaborador su "gran trabajo" en la campaña electoral, especialmente durante la Convención Nacional Republicana del mes pasado.

Días atrás, el diario The New York Times informó que la compañía de Manafort había recibido casi 13 millones de dólares procedentes de un partido pro ruso en Ucrania, cosa que Manafort no había revelado, como lo requiere la ley estadounidense, cuya violación es considerada un delito grave que puede acarrear un máximo de cinco años de cárcel y una multa de 250.000 dólares.

Mientras tanto, Trump publicó su primer anuncio televisivo para las elecciones generales con una crítica a las políticas de inmigración de su rival demócrata, Hillary Clinton, y una advertencia sobre el "amañado" sistema electoral estadounidense. "En los Estados Unidos de Hillary Clinton, el sistema permanece amañado contra los estadounidenses", dice el narrador de la alocución, que se emitirá a partir de la fecha en cuatro estados del país, Florida, Carolina del Norte, Pensilvania y Ohio.

"Los refugiados sirios nos inundan. Los inmigrantes ilegales condenados por la comisión de delitos pueden quedarse, se benefician de la Seguridad Social, cruzando la línea. Nuestra frontera está abierta, que es más de lo mismo, pero peor", añade el spot. El anuncio, de 30 segundos, señala que el magnate, de resultar electo, se centrará, como prioridad, en el fortalecimiento de la seguridad fronteriza y en proteger a los estadounidenses. "Los Estados Unidos de Donald Trump son seguros. Los terroristas y criminales se mantendrán fuera. La frontera será segura, nuestras familias estarán seguras", insistió.