Organizaciones de cubanos anticastristas de la ciudad de Miami coincidieron en destacar la victoria del republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales de EEUU porque creen que supondrá un freno al reciente acercamiento iniciado por la administración de Barack Obama, que restituyó las relaciones bilaterales con La Habana tras medio siglo.

En una reciente reunión con cubanos en la Florida, el entonces candidato alabó a las Damas de Blanco y aseguró que de ser electo él no cerraría los ojos ante la "violación de los derechos humanos" como, dijo, había hecho su rival demócrata, Hillary Clinton. Trump visitó la sede de la Brigada 2506, en el barrio de la Pequeña Habana, donde afirmó que Obama no había realizado un buen acuerdo con Cuba y que Clinton era más de lo mismo "o incluso peor".

Ramón Saúl Sánchez, presidente del Movimiento Democracia, recordó que si bien Trump no criticó que Obama restableciera los lazos con Cuba, cuestionó que "no lograra la menor reciprocidad ni que la causa de los derechos humanos en la isla estuviese en primer plano en la agenda de negociación". Por ello, aventuró Sánchez, es muy probable que el presidente electo "no revierta todo lo que ha hecho Obama", pero sí acabe con la "concesión permanente de Estados Unidos sin ninguna reciprocidad".

Para Antonio Díez Sánchez, secretario general del Movimiento Cristiano de Liberación (MCL), la inesperada victoria de Trump supondrá un "freno al acercamiento" a la isla caribeña. Por su parte, Ángel Desfana, director de Plantados, se mostró convencido de que Trump "cumplirá con lo que ha dicho en la campaña de no aceptar una política hacia Cuba" que consista en "entregarlo todo sin recibir nada". Desfana destacó también su entusiasmo por el hecho de que los republicanos tendrán mayoría en ambas Cámaras del Congreso, lo que puede significar además un "aumento de la ayuda a los disidentes en la isla".

En ese mismo sentido, el periodista y escritor cubano Carlos Alberto Montaner, un notorio anticastrista, consideró que es "muy probable" que Trump "invalide la apertura política" encarada por Obama hacia Cuba. Remarcó que las medidas impulsadas por el mandatario saliente se hicieron mediante "decretos presidenciales", que pueden "invertirse por el mismo procedimiento". "No habrá un levantamiento del embargo a corto o medio plazo, terminará el estímulo a los inversionistas extranjeros y el deshielo volverá a congelarse", se esperanzó el columnista de la CNN.

Cuba y Estados Unidos anunciaron a fines de 2014 un acuerdo para normalizar sus relaciones después de medio siglo de enemistad, que en julio de 2015 dio como resultado la reapertura de las respectivas embajadas en Washington y La Habana. Desde entonces empresas estadounidenses de diversos sectores han ido concretando negocios y abriéndose mercado en Cuba, aunque el bloqueo económico se mantiene.

El gobierno de Raúl Castro no ha emitido hasta ahora una opinión acerca del triunfo de Trump. El diario oficial Granma publicó que el republicano venció "contra todos los pronósticos" y atribuyó su victoria a votantes "desencantados" con "los políticos tradicionales de Washington".