La CGT San Lorenzo convocó a un paro general para mañana miércoles en todo el cordón industrial. El secretario general del Sindicato de Petroquímicos de esa ciudad, Eduardo Ancudowikz, confirmó el lunes por la tarde la decisión de parar con el fin de presionar a la empresa para dejar sin efecto los despidos y afirmó que “sigue el piquete”. Ancudowikz también manifestó sus dudas respecto de los fines que persigue ICI al echar a la totalidad de la planta.

Como señala la edición de hoy de Rosario/12, 132 trabajadores recibieron sus telegramas de despidos, mientras una jueza de faltas de San Lorenzo ordenó a la policía el desalojo del piquete frente a la planta. El ministro Rosúa aclaró que dio la orden de "no ejercer represión alguna sobre los trabajadores".

El último viernes, la Intersindical del Paraná había organizado varios piquetes, uno de ellos en la ruta 11 y la A0 12, al que se sumaron las huestes de Edgardo Quiroga y Raúl Castells, del MIJD, en horas de la noche. Pero durante el fin de semana los piquetes se redujeron a las puertas de la planta ubicada en el ingreso a San Lorenzo, en una calle lateral a la ruta 11, que no impedía más que el paso a los vehículos que intenta ingresar a la planta.

En verdad, el de este fin de semana es sólo un capítulo más en la larga pelea que los trabajadores petroquímicos vienen disputando desde hace nueves meses. En este sentido Eduardo Ankudowicz, recordó que "en el mes de junio de 2005 la Cámara de Industrias Químicas y la Federación que las nuclea acordó un aumento de salarios, que ICI, argumentó entonces, no podía abonarlo".

"Así comenzó el conflicto: fue entonces que nos mostramos dispuestos incluso a negociar el aumento que era de un 47 por ciento, pero no accedieron, y respondieron que querían cambiar la modalidad de trabajo y hasta el convenio nacional. Entre las cosas que pretendían hacernos firmar estaba la polivalencia, que significa que un trabajador haga la tarea de tres. Es decir más despidos. Y desde hace nueves meses estamos en este tire y afloje perverso", resumió Ankudowicz.

En el último tiempo la Secretaria de Trabajo aconsejó un arbitraje voluntario, que fue aceptado desde el sindicato, pero que fue rechazado por la empresa.

En tanto, unas cuantas cubiertas humeantes acompañaban a los empleados de la firma que se mantenían anoche en las puerta de ingreso a la planta. Sin respuestas de los representantes de la empresa, y sin ningún acercamiento por parte de las autoridades municipales, la protesta de los petroquímicos por los mas de 100 despidos sigue en pie.

Fuentes: Rosario/12, DyN e Indymedia Rosario