El corte se producía en la rotonda donde se unen las avenidas Escalada y Fernández de la Cruz, frente a un predio donde funciona un cementerio de automóviles que está a cargo de la Policía Federal.

Con la quema de algunos neumáticos los vecinos cortaron el paso de los autos, aunque permitían el paso del Premetro, en tanto la policía vigilaba a unos cincuenta metros de distancia de los manifestantes.

El grupo de residentes de la villa volvió a manifestar por el mismo cometido que lo hizo el 21 de setiembre pasado, cuando hubo choques con la policía y una docena de detenidos.

"Hace un mes que nos golpearon y nos intentaron quemar las casitas, en ese tiempo vinieron funcionarios del gobierno nacional y de la ciudad haciéndonos promesas pero no cumplieron nada", dijo Diosnel Pérez, uno de los referentes del grupo.

Pérez basó su reclamo en la ley 1.770 sancionada el año pasado que da cuenta que el predio debe ser utilizado para la construcción de viviendas.

En el gobierno de la Ciudad vienen afirmando que ya la Nación se comprometió a ceder a la comuna el predio que actualmente está en manos de la Policía Federal.

Allí hay un cementerio de autos obsoletos y otros que están bajo situación judicial. Todo en un predio donde la contaminación viene dañando tierra y aire y ya se han dado al menos un caso de leptospirosis.

"Nosotros queremos que se haga un nuevo barrio, no un nuevo asentamiento, queremos que con las cooperativas que formamos podamos hacer nuestras casitas", dijo Pérez, y se mostró a favor de "abrir calles", tal cual describen las propuestas que en su momento elaboró el gobierno comunal.

Fuente: DYN

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