El legislador presentó su renuncia "personal e irrevocable" al cuerpo, que en la sesión desarrollada anoche se la aceptó prácticamente sin debate.

En el texto de la renuncia, Aparicio manifestó su convicción de "que la justicia debe tener la libertad de accionar ante todos los ciudadanos" y agregó: "Como legislador debo rendir cuentas y encarar todos los pasos que sean necesarios para esclarecer el hecho del que política y mediáticamente se me acusa".

El diputado justicialista, quien hasta ayer representaba al departamento San Martín, fue vinculado al crimen de Liliana Ledesma, una vendedora de huevos de la localidad fronteriza de Salvador Mazza, ocurrido el 21 de setiembre pasado, en una pasarela del acceso sur a esa población, a más de 400 kilómetros al norte de Salta Capital.

La mujer, quien había denunciado en reiteradas ocasiones al diputado por el bloqueo de caminos vecinales cercanos a los campos de su propiedad y a sus socios y familiares, fue asesinada de seis puñaladas y recibió un corte en la boca, lo que fue entendido como una señal mafiosa.

Por el crimen están detenidos, acusados de "homicidio", Gabriela Aparicio, la hermana del renunciante legislador; su concubino, Anny Tárraga; y un amigo de ellos, Lino Moreno, mientras que se encuentran prófugos los finqueros Delfín y Raúl Castedo, sindicados como los autores intelectuales del crimen.

El hecho de ser hermano y cuñado de dos de los detenidos y estar relacionado comercialmente con los hermanos Castedo, además de las denuncias públicas de Ledesma, vincularon al legislador con la causa.

Ante el juez Nelson Aramayo, Aparicio negó estar involucrado en el caso y se puso a disposición de la investigación.

Fuente: Télam