Paralelamente, Parrilli se presentó ante la Fiscalía para reportar que dirigentes de River otorgarían "financiamiento y protección" a "Los Borrachos del Tablón", versión de "La Doce" en Boca, y precisó que un grupo de hinchas entre los que figuran Schlenker y Luis "Luisito" Ignacio Pereyra, fueron imputados por el crimen de Cristian Leonel Rousoulis Tarraga.

El 22 de diciembre de 1996, Rousoulis Tarraga fue asesinado al término de un partido que River, como visitante, disputó con Independiente en el estadio del club de Avellaneda, y aunque por el homicidio fueron imputados integrantes de "Los Borrachos...", lo cierto es que el caso nunca fue esclarecido.

El asesinato "que no pudo esclarecerse por no identificarse a sus autores, fue cometido por dos o tres personas pertenecientes a la así llamada barra brava de River Plate, que aparentemente se desplazaban en una moto y que alcanzaron a Rousoulis en las afueras del estadio", explicó Parrilli, que representó en la causa a la madre de la víctima.

Parrilli reflotó hoy el caso de Rousoulis por haber detectado que en aquel expediente figuran "reconocidos integrantes de la barra brava de River" que, ahora, aparecen involucrados en el enfrentamiento con heridos que hubo el domingo pasado en el estadio Monumental, antes del partido con Lanús por la primera fecha del Clausura.

Además, el abogado -que es hincha y socio del club de Nuñez- dijo en declaraciones radiales que la pelea entre sectores de la barra brava se suscitó por la participación que "Los Borrachos..." tendrían en la millonaria transferencia del "Pipita" al Real Madrid.

"Se hablaba de 60 mil pesos por mes" que los presuntos barras debían compartir, dijo Parrilli.

Por otra parte, el abogado alertó a la Fiscalía con jurisdicción en Nuñez, cuyo titular es José María Campagnolli, acerca de la vinculación de un grupo de hinchas con dos hechos: el asesinato de Rousoulis y la riña del domingo pasado.

Puntualmente, Parrilli identificó a Luis Ignacio Pereyra, alias "Luisito", a Edgard Daniel Butassi o " El Diariero", a Albino Saldivia o "El Mono", a Carlos Alberto Masid o "El Gallego Chofitol", a Alan Schlenker y a "Adrián", que sólo figura con el nombre, sin apellido, en el caso Rousoulis.

El letrado explicó que, aunque "han transcurrido 8 años" desde el asesinato en Avellaneda, "lo concreto es que varios de los nombres de conocidos barrabravas de River Plate" investigdos por la muerte de Rousoulis, "continuaron siendo miembros del grupo aludido ( ...), que tiene un elevado grado organizativo" y "se ha mantenido durante las distintas dirigencias políticas que tuviera el Club".

En la presentación Parrilli dijo que la barra de River constituye "una suerte de grupo de tareas para todo servicio, utlizado por los dirigentes" que "financian, sostienen y protegen" a los barras.

Fuente: DyN