El secretario general del gremio petrolero, Luis Sosa, aseguró que la medida de fuerza decidida en una asamblea responde a la "falta de respuestas" luego de "tres meses de negociaciones" con las empresas del sector en ámbitos del ministerio de Trabajo de la Nación, para que otorguen un aumento de 1000 pesos a los trabajadores.

Sosa señaló que el paro se llevará a cabo "hasta lograr la reivindicación salarial" y afirmó que la medida tiene desde esta mañana un acatamiento del "cien por ciento" en los yacimientos ubicados en la zona norte de Tierra del Fuego.

El dirigente explicó que el sindicato "abandonó la mesa de diálogo" luego de "tres meses" de conversaciones "sin un solo avance" y de "volver constantemente a fojas cero en la discusión".

"Nos levantamos de la mesa de negociación para empezar a dialogar a través de las acciones concretas como lo es este paro total de las actividades, en las diferentes plantas petroleras en la provincia", afirmó Sosa.

El gremialista recordó que la negociación con las empresas petroleras que operan en la isla comenzó "en septiembre de 2006" con un reclamo de "1200 pesos de aumento" que luego declinaron a "1000 pesos", pero sin obtener una respuesta de la patronal.

Sosa criticó a las autoridades del gobierno de Tierra del Fuego por "no darse cuenta de la gravedad del conflicto ni de lo problemático que puede ser para la provincia si no se produce gas o petróleo".

El conflicto se da en pleno proceso preelectoral en Tierra del Fuego, luego de que el gobernador Hugo Cóccaro, del partido Unión y Libertad (PUL), pero aliado al kirchnerismo, decidiera que los comicios generales en la provincia austral se realicen el 17 de junio.