El diario "Ultimas Noticias" informó de que el ex general Ramón Guillén y su hijo, el capitán en servicio activo Tomás Guillén, fueron recluidos en las últimas horas en una cárcel militar y en la Dirección de Inteligencia Militar (DIM), respectivamente, por disposición de un juzgado militar.

El abogado de los imputados, Guillermo Heredia, dijo al diario que a sus clientes "sólo se les dijo" que estaban siendo investigados por su participación en "un reciente plan conspirativo" y que desconocían otros detalles dado que "las actas del procedimiento fueron declaradas de carácter reservado".

Las detenciones se produjeron poco después de que en uno de los programas de la emisora de televisión estatal VTV se difundiera una grabación telefónica en la que se sugiere la planificación del asesinato de Chávez.

En la conversación telefónica supuestamente participan el general y el capitán detenidos, una mujer aparentemente extranjera llamada Sindry Patricia y otros supuestos generales, uno de ellos nombrado como Serruti.

El moderador del programa de VTV emitido anoche, Mario Silva, anunció que entregará a las autoridades la grabación aunque no reveló cómo la obtuvo.

Chávez ha reiterado en los últimos días sin mayores precisiones que "militares golpistas" al servicio de "la oligarquía" nacional, junto a agentes de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de EEUU y del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) de Colombia, han retomado sus iniciativas para intentar derrocarlo y matarlo.

"Ellos (sus enemigos y opositores) saben que mientras Chávez está aquí (en el poder) la revolución bolivariana seguirá profundizándose y extendiéndose; sabemos que no descansarán en su empeño por eliminarme físicamente", denunció el gobernante en una reciente rueda de prensa.