La toma se adoptó luego de que no se concretara una sesión extraordinaria del consejo académico, donde un grupo de alumnos deseaba analizar la implementación de reformas curriculares en el plan de estudios.

El dirigente estudiantil Pablo Maciel, explicó que reclaman "una respuesta a quejas contra el plan de estudios que rige desde 2004. Los alumnos que lo cursan tienen una opción menos para aprobar el año (el segundo llamado de la mesa de exámenes finales de marzo) pese a que tienen más exigencias".

"Además, con el cambio en la organización de las materias se perdieron muchos contenidos y así se precarizó la formación de grado, pero en forma paralela se crearon cursos de posgrado arancelados", denunció Maciel.

Autoridades del decanato explicaron que los consejeros no asistieron a la sesión porque "como su mandato finaliza el próximo 1 de abril, no se quieren comprometer con decisiones tan importantes como el cambio de un plan de estudios".