"Hay grave corrupción en el Congreso", afirmó Correa durante una cadena radial y no hubo reacción inmediata de los 18 aludidos por el mandatario.

Explicó que el legislador César Alonso Mora del Partido Sociedad Patriótica (PSP), a nombre de 18 diputados del bloque denominado Dignidad Nacional solicitó cargos en entidades públicas a cambio de votar a favor de una "ley de justicia financiera" en el Congreso unicameral de 100 diputados.

En la cadena radial, el gobernante identificó a los 18 legisladores con sus nombres y apellidos. Se trata de diputados suplentes que asumieron los curules en reemplazo de diputados principales que fueron destituidos en marzo por el Tribunal Supremo Electoral en un intrincado problema jurídico-institucional de la legislatura.

Relató que tras recibir la solicitud para acudir a una reunión personal con el mencionado diputado envió a un oficial de policía encubierto como si fuera un asesor presidencial para escuchar la propuesta que incluía pedidos de altos cargos en empresas estatales como la petrolera Petroecuador, de telecomunicaciones Andinatel, y en la Dirección de Hidrocarburos, entre otras.

"Lo que no sabía este señor (diputado) es que mi supuesto asesor era un capitán de policía, y tenemos las pruebas que el lunes serán entregadas a la Fiscalía para meter presos a estos corruptos", añadió el jefe de Estado.

El legislador César Mora, se reunió con el supuesto asesor "en representación" de otros 17 diputados y condicionó el apoyo al Ejecutivo, a cambio de "tener la vicepresidencia de la estatal Petroecuador", detalló Correa.

Además pidió para sus colegas la "dirección nacional de hidrocarburos para poder seguir contrabandeando gas, la presidencia de (la telefónica) Andinatel, la dirección provincial de salud de Guayas y el directorio de Hidronación", añadió.

El gobierno impulsa una ley que busca reducir las tasas de interés del sistema financiero y que mantiene dividido al Parlamento que deberá pronunciarse el próximo viernes. La iniciativa ha sido criticada por la Asociación de Bancos pero se aprobó con modificaciones que posteriormente fueron vetadas parcialmente por el Ejecutivo. Se espera una decisión final del Congreso.

Correa aseguró que el episodio es la evidencia del manejo al que están "acostumbrados" los legisladores, por lo que reiteró que una Asamblea Nacional que debe elegirse el 30 de septiembre "tendrá que disolver el Congreso que no sirve para absolutamente nada y tiene altas dosis de corrupción". Explicó que ha dado instrucciones a los funcionarios de su gobierno para actuar ignorando al Poder Legislativo.

"Hagan lo que quieran (diputados) que nosotros vamos a seguir trabajando con el pueblo ecuatoriano y si ganamos esta elección el 30 de septiembre, esta Asamblea tendrá que disolver el Congreso, porque no sirve para absolutamente nada", declaró.

Correa, en el gobierno desde enero, llegó al poder con un discurso de confrontación con el Legislativo y la estructura política del país a la cual calificó de "caduca y obsoleta" por lo cual impulsó la instalación de una Asamblea Constituyente que elabore una nueva constitución.