El general Rick Lynch, comandante de las tropas estadounidenses en el centro de Irak, dijo hoy en una conferencia de prensa en Bagdad que "nos faltan soldados de la coalición, hombres de la seguridad iraquí, y debemos continuar manteniendo una fuerte presencia" en el país. Lynch agregó que para la seguridad de las provincias bajo su comando necesitaría siete batallones iraquíes y cinco unidades de policía suplementarios.

"Tenemos necesidad de aumentar la confianza y la competencia de las fuerzas iraquíes para mantener la seguridad. Esas fuerzas mejoran constantemente, pero son numéricamente insuficientes", agregó, en alusión a un eventual retiro de las tropas extranjeras.

El sábado, el primer ministro iraquí, Nuri al-Maliki, había afirmado que las fuerzas de su país estaban "listas" para tomar el control de las operaciones de seguridad en Irak. "Podemos tener completa confianza en que somos capaces de asumir plenamente la responsabilidad de la seguridad cuando las fuerzas internacionales deseen retirarse" de Irak, dijo al-Maliki.

Sin embargo, al hablar en una rueda de prensa en Bagdad, el primer ministro afirmó ayer que "nuestras fuerzas tienen necesidad de un equipamiento y formación mayores".

Días atrás, un informe del Congreso de Estados Unidos reveló que el gobierno de Bagdad había fallado en los objetivos pre-fijados en materia de seguridad.

Además, el jefe de la CIA, Michael Heyden, citado por el diario Washington Post, dijo el sábado que el premier iraquí es "incapaz" de gobernar.

Este domingo, las declaraciones del general Lynch se produjeron en medio de una nueva ola de violencia, con ataques y atentados que causaron al menos 20 muertos, según fuentes locales y policiales.

Al menos 10 muertos y 25 heridos causó hoy el estallido de un auto-bomba en una plaza muy concurrida en un barrio céntrico de Bagdad, según dijo la policía.

La explosión alcanzó a personas que circulaban en el lugar y a clientes de negocios y restaurantes en Plaza Hussein, en el distrito chiita de Jadriya.

Asimismo, cinco guardias de frontera iraquíes murieron hoy en una emboscada a su patrulla en la región autónoma del Kurdistán iraquí, en el límite con Irán, en Penjwin, dijo la policía local.

En el pasado, otras veces guardias de frontera fueron atacados en esa región por un grupo islámico que dijo llamarse Al Qaida in Kurdistan (ex Ansar al Islam), que opera en la frontera entre Irán e Irak. Por otra parte, en el sur de Irak, tres policías murieron y otros dos fueron heridos en enfrentamientos con hombres armados en la región de Nasiriya, según informó la policía local.

En Aziziyah, al sur de Bagdad, hombre armados irrumpieron en la casa de un asesor municipal del pueblo, Hassim Jassim, y mataron a su esposa y su hijo, dijo también en este caso la policía del lugar.

La misma fuente sostuvo que Jassim no se encontraba en su domicilio cuando se produjo el ataque.

Fuente: ANSA

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