Fuentes policiales informaron que el incidente se originó este mediodía cuando un grupo de reclusos inició la quema de colchones de goma espuma en el ingreso a la sección 1 de la unidad carcelaria, ubicada en avenida Alsina 850 de la capital santiagueña.

De acuerdo a las primeras investigaciones, el fuego fue iniciado por el recluso Diego Armando Coronel, que según sus familiares, momentos previos al motín "fue sometido a una golpiza por guardiacárceles".

Según las fuentes, que durante el incidente, medio centenar de presos volvieron a reclamar por "la agilización de causas judiciales y conmutación de penas".

La revuelta fue finalmente controlada poco después del mediodía, con la intervención del Cuerpo de Infantería y el grupo Getoar de la policía santiagueña, dijeron los informantes.

A raíz del hecho, cuatro presos que inhalaron gases tóxicos fueron internados en la sala de urgencias del hospital Ramón Carrillo, donde reciben asistencia.

Respecto del interno Coronel, los voceros indicaron que había permanecido hasta la semana pasada detenido en la Alcaidía de la Unidad Regional 2 y por disposición de la justicia santiagueña, al igual que otros reclusos, fue trasladado y alojado en la unidad carcelaria.

La decisión de ordenar el traslado a la prisión fue motivada por recientes incidentes ocurridos en la Alcaidía de La Banda, en uno de los cuales el ex policía Héctor Albarracín, procesado por el doble crimen de La Dársena y condenado a 19 años por el crimen de un ganadero, sufrió quemaduras durante una quema de colchones.

Anteriormente, los detenidos habían sido llevados a la Alcaidía para facilitar los peritajes ordenados por la Justicia que determinarán cómo ocurrió el incendio en el pabellón 2 del Penal de Varones que causó la muerte de 36 detenidos.

Los reclusos y sus familiares denunciaron que el motín ocurrido el 4 de noviembre último comenzó por la represión de los guardias ante un reclamo y negaron la versión del intento de fuga frustrado.

En la misma denuncia, los presos aseguraron que cuatro guardiacárceles fueron puestos "en disponibilidad" y sometidos a un sumario administrativo acusados de reprimir a tiros y de haber dejado morir a los reclusos durante el incendio.

En tanto, el juez que interviene en las actuaciones, Ramón Tarchini Saavedra, que se encuentra abocado exclusivamente a la investigación del motín, aún mantiene el "secreto de sumario" en la instrucción judicial.

De acuerdo a las primeras investigaciones, el motín comenzó luego de las 18 del 4 de noviembre pasado, tras finalizar el horario de visita en el penal, en momentos en que los presos regresaron a los pabellones y mantuvieron un violento incidente con un grupo de guardiacárceles, que derivó en el trágico incendio.

Las autopsias revelaron que todas las muertes fueron por "asfixia" por inhalar los gases tóxicos provocados por la quema de colchones de goma espuma.