00:00 › DEMORAS, CANCELACIONES EN EL SUBTE POR RETENCIóN DE TAREAS DE TRABAJADORES
Trabajadores de los subterráneos porteños y del Premetro realizan hoy un paro de 24 horas, en un clima de tensión con la Unión Tranviarios Automotor (UTA), luego de que una patota de adherentes a su conducción agrediera ayer por la tarde a delegados, periodistas y empleados del Hotel Bauen de Buenos Aires, previamente a una conferencia de prensa que la Comisión Gremial Interna de Metrovías iba a brindar en ese hotel recuperado por sus trabajadores. UTA y Metrovías no concurrirán a la mesa de diálogo convocada a las 17 en el Ministerio de Trabajo, mientras que los delegados directamente no fueron invitados.
“Cuando faltaban pocos minutos para que se inicie la conferencia de prensa citada en el Hotel BAUEN por el Cuerpo de Delegados del subte, una patota de militantes de la Agrupacion 17 de octubre invadieron el Salon Consular y agredieron a los periodistas y a los delegados y trabajadores del subte que se encontraban alli presentes”, difundieron en un comunicado los delegados del subte desde su sitio metrodelegados.com.ar.
“Al acercarse personal de seguridad del Hotel BAUEN, comenzaron a arrojar sillas contra todos los vidrios causando graves daños a las instalaciones. Algunos periodistas siguieron y registraron a los patoteros hasta la avenida Callao, donde los aguardaba un colectivo y una vez alli, ante la presencia de las camaras continuaron amenazando e insultando a los medios que trabajaban en el lugar”, señalaron los representantes de los trabajadores del subte.
"La misma gente que fue ayer al Bauen golpeó después a cuatro delegados en la estación Primera Junta", informó hoy Roberto Pianelli, delegado de la línea E.
Pianelli dijo que el nuevo episodio violento ocurrió cerca de las 21.30 del lunes, horas después del enfrentamiento en el hotel donde el cuerpo de delegados iba a informar acerca del reclamo a la empresa por un aguinaldo completo.
El incidente en el Bauen, donde hubo golpes, empellones y algunos destrozos, sin intervención policial, se produjo por la irrupción de un grupo de unas veinte personas que increpó a los presentes, entre los que había trabajadores de Metrovías, periodistas y empleados del hotel, y luego se retiró en un colectivo fuera de línea, según mostraron los canales de noticias.
La medida de fuerza, que hasta ese momento no había sido anunciada, fue convocada al anochecer del lunes en demanda de un doble aguinaldo y el cumplimiento de acuerdos sobre ascensos y promociones, y en repudio a la agresión sufrida por los representates de base y otros trabajadores.
La empresa Metrovías sostuvo que esta mañana que ponía "los máximos esfuerzos" para implementar un diagrama de emergencia en todas las líneas de subterráneos, que permitía viajar a los usuarios con demoras de entre 10 y 30 minutos.
El servicio de subterráneos de las líneas A, B, C, D, E y H se cumplía esta mañana con un diagrama de emergencia, mientras que el Premetro se encontraba totalmente interrumpido por la medida de fuerza, informaron fuentes de Metrovías.
La vocera de la empresa concesionaria del servicio, Lucila Maldonado, explicó que los convoyes eran manejados "por personal jerárquico, que son instructores de los conductores, de modo que los pasajeros viajen absolutamente seguros".
En tanto "el servicio del Premetro se encuentra totalmente interrumpido", agregó.
Maldonado agradeció "la colaboración de las autoridades nacionales y de la Policía Federal" para "descartar que pueda ocurrir algo dentro del subterráneo".
La Policía Federal desplegó formaciones de infantería en las cabeceras y mantenía bajo vigilancia reforzada toda la red.
Los alcances del paro se vieron desde tempranas horas del día en todas las cabeceras y estaciones nodales del sistema del subterráneo porteño, y aunque la empresa Metrovías organizó un servicio de emergencia las demoras y cancelaciones fueron importantes esta mañana, con largas colas en las paradas de colectivos, escasez de taxis libres y el tránsito vehicular altamente congestionado.
A propósito del diagrama de emergencia, el delegado Pianelli sostuvo en declaraciones radiales que los pasajeros "corren riesgos adicionales por la falta de capacitación del personal destinado al frente de los trenes. Pusieron a conducir las formaciones a personal sin registro para ejercer la tarea, sin entrenamiento, este diagrama de emergencia pone en riesgo a los pasajeros y trabajadores”.
El delegado Néstor Segovia advirtió por su parte que el personal jerárquico que conduce hoy las formaciones por el paro de actividades "no tiene registro habilitante", pero aseguró que no se entorpecerá el servicio ni se arrojarán "a las vías" para impedir la salida de los vagones.
Segovia declaró a la prensa, en la estación Constitución, una de las cabeceras de la Línea C, que "los jefes no tienen registro habilitante" por lo que "no están capacitados" para conducir los subtes que en esta jornada cumplen una frecuencia más espaciada, lo que genera en algunos casos aglomeraciones de pasajeros.
De todos modos, aseguró que "no vamos a entorpecer ni a tirarnos a las vías ni nada" para impedir la realización del servicio por parte del personal jerárquico, ante el paro de 24 horas.
La medida es desconocida por el sindicato Unión Tranviarios Automotor (UTA), que nuclea a trabajadores del transporte automotor de pasajeros y del subte, cuya conducción, moyanista, carece de influencia sobre el cuerpo de delegados, y muchas veces ha tenido una política de desconocimiento y negociación a espaldas del combativo cuerpo de base.
El delegado Néstor Segovia llamó esta mañana "a la reflexión" a los individuos que generaron los incidentes, donde resultaron heridos dos empleados y sostuvo que "acá los que pierden son los trabajadores y los pasajeros".
"Estamos haciendo un reclamo activo. Queremos cobrar un aguinaldo doble, queremos la bolsa de trabajo y el ascenso democrático para todos los compañeros", especificó el delegado.
En sentido opuesto, el secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, aseveró que "el gremio no está en conflicto y, por lo tanto, rechaza y repudia la huelga convocada para mañana (por hoy) en los subterráneos".
El Ministerio de Trabajo convocó a una reunión para las 17 en la sede de Callao al 100, que será supervisada por el funcionario Adrián Caneto, quien buscará "acercar posiciones", aunque difícilmente todas estén representadas, ya que los delegados no fueron comunicados.
La Defensoría del Pueblo de la Nación, organismo que en el pasado había oficiado de mediador entre las partes, tampoco habría sido invitada a participar del acercamiento de posiciones.
Por su parte, Lucila Maldonado, calificó de "lamentables" los incidentes y desmintió cualquier participación de la concesionaria Metrovías en la reunión.
Roberto Pianelli, sostuvo que los delegados del subte "somos los primeros en querer sentarse a hablar con la empresa para solucionar este conflicto", y se apenó "porque no fuimos convocados a ninguna mesa de diálogo".
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