"Estamos preparados para asumir cualquier acción necesaria para mejorar la estabilidad en los mercados financieros", aseguró el comunicado conjunto elaborado por Estados Unidos, Japón, Alemania, Canadá, Gran Bretaña, Francia e Italia.

Los países miembro se comprometieron a tomar medidas individuales para garantizar el crecimiento y la seguridad de sus economías, al tiempo que mostraron su preocupación por las perspectivas económicas: "el mundo se enfrenta a un entorno más desafiante e incierto", admitió el documento reproducido por la agencia alemana DPA.

Aunque los fundamentos económicos globales "siguen siendo sólidos, el riesgo de problemas persiste", indicó el texto.

Al discutir las causas de la coyuntura actual, los miembros del grupo también acordaron una "total desclasificación, por parte de instituciones financieras, de sus pérdidas y de la valoración de sus productos estructurados".

Por otra parte el grupo instó a los líderes chinos a acelerar la reforma de su moneda y permitir la flotación del yuan frente al resto de principales divisas.