"Creo que ya no nos queda esperanza de que algún día alguien diga que se están equivocando. Miedo no tengo, lo que siento es bronca y dolor. Me da impotencia saber que se siguen haciendo las cosas mal", dijo la mujer de Cabezas en declaraciones a un canal televisivo.

La mujer explicó que no sabe cómo explicarle lo que sucede a su hija Candela. "Ella escuchará algo en la radio, en la televisión o lo leerá por Internet, pero es algo que no tiene explicaciones".

"Nunca me han llamado para decirme 'uy, mirá qué bueno lo que ha pasado'. Cada vez que me llaman es para decirme que (los condenados) están en libertad, o que van a salir, o todas cosas favorables a ellos", dijo.

La mujer aseguró que se comunica a diario con los padres y con la hermana de Cabezas. "Con ellos hablé anoche, pero no estábamos informados de esto, seguramente esta tarde hablaremos nuevamente", aclaró.

"En estos 12 años, las víctimas hemos sido nosotros y ellos, por el contrario, han ido recibiendo premios. Siento que cada año les van dando un premio por lo que hicieron y no es justo", agregó.

Además, explicó: "Hay dos padres que viven con el corazón en la mano y con una angustia eterna, y tres niños que han crecido sin su padre. Y estos asesinos están protegidos por empresarios poderosos o por la Justicia. Que contradicción, no? La Justicia debería estar a favor nuestro y no, está a favor de los asesinos".