"Hoy, el 75 por ciento de los trabajadores manifestaron su voluntad de trabajar no adhiriendo al paro propuesto por un grupo de sindicatos y dirigentes sindicales opositores", enfatizó Capitanich en su habitual conferencia de prensa en la Casa Rosada.

Por otra parte, evitó hacer algún tipo de valoración respecto Moyano y Barrionuevo "luego de los improperios, ataques y descalificaciones a las que he sido sometido". No obstante, recurrió a la ironía: "Cuando hablan de mí lo hacen de modo agraviante, injurioso; ellos tienen una pureza de lenguaje que más o menos emulan a Jorge Luis Borges y a Bioy Casares desde el punto de vista de la expresión escrita, una empatía de carácter verbal, una riqueza de lenguaje extraordinario y transmiten un lenguaje florido que causa emoción tras emoción".

Capitanich acusó al sindicalismo opositor de "no importarle las políticas distributivas" aplicadas por el Estado” y los instó a “decir públicamente si no quieren pagar el Impuesto a las Ganancias”. Estos gremios, aseveró, “no les interesa proteger el rol del Estado”, pero “nosotros nos tenemos que ocupar de los que necesitan del amparo” de las autoridades.

También, remarcó que los sindicatos que "más se quejan" y llevan adelante la huelga "tienen a los trabajadores con el mayor nivel de ingresos", al recordar que "el 10,4 por ciento de la población" está exenta del mínimo no imponible.

Según el funcionario, el cálculo de adhesión que sacó el Gobierno fue hecho según “el número de afiliados y el número de sindicatos que no adhierieron” al paro, y que “eso nos da una cifra casi del 75 por ciento”. Mencionó al “gremio de Comercio, que tiene casi un millón de afiliados; la Uocra, cerca de 440 mil; la Unión Obrera Metalúrgica, casi 300 mil; UPCN, casi 300 mil”, entre otros sindicatos.

Por otra parte, Capitanich dijo que “hemos observado el funcionamiento de las líneas de transporte urbana e interurbana; del subte, a excepción de la línea B, o de muchos trabajadores que ha demostrado su vocación y voluntad” de trabajar en el día de la fecha. “Somos extremadamente respetuosos del derecho de huelga, pero entendemos que no se dan las circunstancias, ni el momento ni la oportunidad”, señaló el jefe de ministro, quien de todos modos aclaró que “nosotros no hacemos oídos sordos a ningún reclamo”.

Por otra parte, dijo que le “extraña” el “comportamiento de los partidos y agrupaciones de izquierda, ya que “el impuesto a las Ganancias hoy alcanza a los trabajadores que más ganan, y siempre tuve en cuenta que el PO o el MST estaban por los que menos ganan”. Además, “siempre estaban en contra de la burocracia sindical, y hoy son funcionales a ellos”, concluyó.