Sanz afirmó que la medida es para "construir fortaleza" y "garantizar gobernabilidad", y aseguró: "La Constitución lo habilita absolutamente". Apuntó contra "reproches que toman cierto tono fundamentalista" y reiteró: "Respaldo absolutamente lo que ha hecho el Presidente".

Sobre la no convocatoria a sesiones extraordinarias para tratar los pliegos como marca el mecanismo habitual, explicó que esa decisión se debió a que "hay que construir consenso político parlamentario que todavía no están construidos".

"Hay tres cosas que un presidente no puede sufrir en los primeros tiempos de su gobierno: un fallo de la Corte en contra, una votación en contra del Congreso y un paro sindical", argumentó Sanz.

"Es cierto que nunca hubo antecedentes similares con jueces de la Corte, pero alguna vez tenía que ser la primera, y el Presidente lo ha hecho, no solamente desde el punto de vista legal de manera irreprochable, sino que también hay un argumento político: el Presidente ha decidido no convocar a sesiones extraordinarias en el Congreso", explicó.