El Día del Docente Universitario encontró ayer a los trabajadores de la educación superior a la espera de un posible aumento salarial que llegaría con la firma del Convenio Colectivo de Trabajo. El incremento –de producirse– llegaría antes que la apertura de las negociaciones paritarias, que recién serán convocadas una vez que venza, en junio, el acuerdo cerrado el año pasado por 16 meses. En ese contexto, y mientras uno de los gremios del sector –la Conadu Histórica– convocó a un paro nacional, anteayer hubo una reunión entre los representantes sindicales, el Consejo Interuniversitario Nacional –que nuclea a los rectores– y autoridades del Ministerio de Educación: desde la cartera educativa se comprometieron a dar una respuesta en los próximos días.

“Estamos ya con medida de fuerza y nos sentimos sumamente impotentes ante esta situación. El Gobierno no dispone de un presupuesto necesario para que contemos al menos con un paliativo hasta junio”, señaló la secretaria adjunta de Conadu Histórica, Claudia Baigorria. El gremio arrancó ayer un paro de 48 horas para reclamar un aumento salarial de emergencia retroactivo a enero para todas las categorías docentes. Con las mismas demandas, el sindicato está llamando a una nueva huelga de 72 horas a partir del próximo martes 20.

El miércoles pasado, la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) convocó a los gremios que nuclean a los docentes universitarios (Conadu, Conadu Histórica y Fedun) y al CIN a una reunión donde los principales ejes de trabajo estuvieron relacionados con la implementación del Convenio Colectivo de Trabajo Docente y la paritaria 2014. Se trató de un encuentro inicial, que se estimaba informal, pero en el que finalmente se trataron los reclamos formales de las distintas partes.

El secretario de Políticas Universitarias, Aldo Caballero, adelantó que el CIN no había terminado sus consultas en las universidades nacionales para la firma y la aplicación del convenio colectivo. Los rectores se amparan en la autonomía universitaria para reservarse el derecho a desconocer algún artículo del convenio si entra en colisión con el estatuto de una universidad. Las federaciones docentes rechazan esa reserva y reclaman que el convenio sea de aplicación obligatoria para todas las instituciones, una vez que sea homologado e instaurado a través de un decreto.

Además de establecer un marco que regulará la actividad de los profesores universitarios, el convenio colectivo prevé un aumento salarial: se trata de un programa de jerarquización docente, que estipula un adicional de hasta un 25 por ciento. Los gremios aspiran a contar con ese plus antes de la apertura de las paritarias.

Por eso, a modo de paliativo y recomposición salarial tras el último incremento registrado en enero pasado, del 7 por ciento –parte del acuerdo por 16 meses alcanzado en 2013–, los gremios propusieron un adicional amparado en este programa de jerarquización. Según explicó el secretario general de Fedun, Daniel Ricci, los trabajadores piden “que en el recibo de mayo se haga una liquidación a cuenta que incluya un 2 por ciento retroactivo a enero”. Los docentes recibirían así un aumento del 10 por ciento por estos primeros cinco meses acumulados. “Pedimos que, como el convenio no se va a homologar dentro de los próximos 20 días, al menos haya un incremento a cuenta”, añadió.

Ante la propuesta de las federaciones, Caballero pidió un plazo máximo de diez días para dar una respuesta tras la reunión. “El funcionario no respondió de manera concreta, pero tampoco se negó”, dijo Baigorria en ese sentido.

Las negociaciones salariales arrancarán de todas formas en junio, antes de que termine el acuerdo firmado en 2013. “En ese momento entendimos que era un buen acuerdo, que representó más de un 30 por ciento de aumento salarial, pero no teníamos previsto lo que iba a pasar en enero, con la devaluación y la inflación”, remarcó Ricci. Consultado sobre si esta vez accederían a un acuerdo con esas características, Ricci negó esa posibilidad y advirtió que aspiran a una paritaria por un año, con una revisión a los seis meses, de acuerdo con la evolución de la inflación. “Nuestra idea es primero acordar el Convenio Colectivo, firmarlo, que nuestro reclamo se solucione lo más rápido posible y, con eso, iniciemos de manera urgente las paritarias”, concluyó.

Informe: Aldana Vales.