“Hay un lío infernal. Hace tres días el acuerdo cerraba en un 90 por ciento y ahora retrocedimos”, lamentó ayer un decano radical de la UBA. Las negociaciones entre las autoridades académicas para postular un gobierno de consenso –con una fórmula compartida y una plataforma de acción incluida– se complicaron el fin de semana. “Estamos muy preocupados por la actitud del vicerrector”, confió otro decano, peronista.

En representación de los dos bloques que dividen a la UBA, los decanos acordaron proponer a Rubén Hallú y Jaime Sorín como candidatos a rector y vice en una asamblea que intentaría sesionar este año. La propuesta supone la renuncia del actual vicerrector, Aníbal Franco, y ahí reside hace dos semanas la principal dificultad. “No quiere poner su renuncia a disposición e impide la única salida que se pudo acordar. Si este acuerdo no sale, la UBA corre serio riesgo de descomposición. Estamos muy preocupados”, añadió un decano del grupo que nuclea a Medicina, Sociales, Arquitectura, Exactas, Filosofía y Agronomía. Desde el bloque mayoritario de Derecho, Veterinarias, Farmacia, Ingeniería, Psicología, Económicas y Odontología, un decano confirmó: “Franco inició el proceso de diálogo entre las partes. Lamentablemente, se llegó a un acuerdo que no lo incluye. Y ahí estamos”. El acuerdo es compartido por la mayoría de los trece decanos. Las autoridades de Psicología y Derecho son las más reacias.

Hasta ahora, los problemas para definir un gobierno compartido no se han replicado en la discusión sobre el programa que esa eventual gestión llevaría adelante. Sin embargo, en una comunicación dirigida a profesores de la lista Protagonismo e Integración, el vicedecano de Derecho, Tulio Ortiz, desmintió un dato publicado por este diario el viernes, donde se afirmaba que los decanos habían confeccionado un borrador de dicho programa: “No sólo no se llegó a ningún acuerdo sobre la plataforma mencionada, sino que ni siquiera se la trató, ni aun se la leyó. Los participantes se limitaron a recibir un mero documento redactado individualmente por uno de los decanos ajeno a nuestro grupo”. Al margen del detalle, fuentes confiables de ambos bloques aseguraron que, desde hace casi un mes, los decanos incluyen entre sus negociaciones la definición de líneas programáticas, cuyos ejes serían –tal como se informó– iniciar la reforma de los estatutos de la UBA, pedir un incremento presupuestario, tender a la gratuidad de los posgrados académicos, impulsar los concursos docentes, rentar a los ad honorem y otros puntos.

Mientras, la oposición estudiantil de la FUBA volvería a escenificarse mañana, cuando sesione el Consejo Superior. Igual que el miércoles 11, los alumnos de izquierda se movilizarán en rechazo a la presentación de las carreras de Ingeniería ante las evaluaciones de la Coneau. Asunto que, de todos modos, según acordaron decanos y vicerrector, no estaría en el temario del día.