En la economÃa estadounidense no sólo es posible comparar los resultados entre modelos socioeconómicos opuestos de simultánea aplicación, sino también demostrar el desastre que la versión ajustadora representa para una economÃa en crisis. Según el Centro para el Progreso Americano y en base a estadÃsticas oficiales nacionales y estaduales, 24 estados (en su mayorÃa republicanos) han recortado el gasto público en un 7,5 por ciento promedio (ajustado por inflación) desde el inicio de la recesión, en diciembre de 2007 y hasta fines de 2010. Contrariamente y en igual perÃodo, unos 25 estados (en su mayorÃa demócratas) han expandido su presupuesto en un 11 por ciento promedio. Las implicancias de esas decisiones son evidentes. Aquellos estados que aplicaron medidas restrictivas sufrieron en promedio: 1) incremento en la tasa de desempleo del 1 por ciento; 2) pérdida de empleo en el sector privado de 2,1 puntos porcentuales; y 3) contracción económica relativa (sobre base nivel nacional) del 2,9 por ciento. Por su parte, los estados que ejecutaron polÃticas de expansión del gasto público (planes de asistencia social, subsidios a empresas y a la producción, obras de infraestructura) registraron en promedio: 1) disminución en la tasa de desempleo de 0,2 puntos porcentuales; 2) aumento del empleo privado del 1,4 por ciento; y 3) crecimiento económico (sobre base nivel nacional) de 0,5 por ciento desde el 2007.
Resultados estadÃsticos: 10 por ciento de recorte en el gasto estatal aumenta en un 0,4 por ciento la tasa de desempleo. Sobre el comportamiento de empleos en el sector privado, 10 puntos porcentuales de retracción en el gasto público infligen una pérdida de 1,6 puntos porcentuales en la tasa de empleo. En cuanto a la performance económica, 10 puntos porcentuales de poda en el gasto público conlleva una contracción de 1,6 por ciento en el producto bruto real estadual.
El fracaso de las polÃticas pro-cÃclicas (y el éxito de sus opuestas) en un paÃs sumido en la peor crisis desde 1930, deberÃa llamar la atención a quienes en Argentina coinciden con los lineamientos del Partido Republicano. Las coincidencias, incluso, se expresan en medidas a favor de una mayor concentración de la riqueza: profundización de los beneficios fiscales e impositivos a las grandes corporaciones e individuos multimillonarios en Estados Unidos; baja o eliminación a las retenciones a las exportaciones de granos y subproductos en la Argentina. Mientras que los republicanos despotrican contra los planes de estÃmulo de Obama, el conservadurismo criollo dispara contra las polÃticas anti-cÃclicas del 2008, ahora devenidas en pro-cÃclicas comprobado el fin de la recesión, sus niveles de crecimiento económico y expansión fiscal.
El ejemplo de Estados Unidos es contundente: las polÃticas de ajuste y la concentración de la riqueza son los peores enemigos del desarrollo económico con equidad social. ¿No resulta por lo menos insólito que el neoliberalismo doméstico plantee tomar, en un paÃs destacado internacionalmente como una de las economÃas que mejor y más rápido se han recuperado de la recesión, las mismas polÃticas que llevan a la ruina a la Europa industrializada, a su patio trasero y a los estados republicanos en Estados Unidos?
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.