Viernes, 25 de noviembre de 2005
DOS PROPUESTAS QUE ACTUALIZAN EL PUNTO DE VISTA FEMENINO
Mujeres vistas por mujeres
Carolina Balbi, autora de Informe demiurgo, y Deby Wachtel, creadora de Siesta, hablan acerca de sus maneras de mirar los géneros.

Carolina Balbi y Deby Wachtel piensan en la mujer.
“Pienso quĂ© sentirĂa mi abuela en aquel tiempo, si habrá tenido alguna vez un orgasmo, si amaba y cĂłmo amaba, si hablĂł con su madre de ello...”, se pregunta Carolina Balbi, dramaturga y directora teatral. Para ella no hay contradicciĂłn entre ser mujer y escribir una obra como Informe demiurgo. La mujer sola y –lo que no es lo mismo– en soledad, en el silencio de sus pensamientos, deseando al hombre del departamento de enfrente sin nunca decirlo, en ese mundo de ama de casa que se ha construido, tan simple como intenso; el hombre que juega a descubrir los secretos de la mujer, a encontrar ese misterio, irrepetible, irreemplazable. Estas y otras cuestiones son llevadas a escena por su obra y la de otra talentosa teatrista, Deby Wachtel, en sus respectivas propuestas, para reconstruir mediante un lenguaje escĂ©nico –aunque con poĂ©ticas muy disĂmiles– todo un universo femenino y abrir asĂ el debate acerca de las (des)igualdades entre gĂ©neros.
Siesta –unipersonal de Wachtel inspirado en la poesĂa de la brasileña Adelia Prado que se presenta los sábados a las 19 en el No Avestruz (Humboldt 1857)– expone la intimidad de una mujer anĂłnima que cose su vestido en una pequeña máquina, al mismo tiempo que trama sus palabras, que como las puntadas de su costura la atan cada vez más a su deseo y a su dolor. “Es una mujer solitaria en un domingo a la tarde, a la hora del crepĂşsculo, horario en que todas podrĂamos suicidarnos de tristeza”, explica su directora. En el contrapunto de esta historia –retrato de una mujer que podrĂa morir por la frustraciĂłn de no ser amada– se encuentra la obra de Balbi, que se presenta los viernes a las 21 en el Espacio CallejĂłn (Humahuaca 3759). La pieza construye a SofĂa, la mujer ideal, “la prostituta y la santa”, Ăşnica y a la vez todas las mujeres en una, amada por tres hombres al mismo tiempo, pero construida como ausente. Porque SofĂa jamás aparece en este supuesto mundo atemporal en el que han quedado sĂłlo tres hombres y, para continuar la especie, uno debe convertirse en mujer. “A partir de este planteo inicial comienzo a abordar el imaginario femenino a travĂ©s de la figura de esta mujer que amaron los tres. Y como ella no está, ellos deberán reconstruirla con sus recuerdos, repetir la historia”, cuenta la directora. De este modo, estos tres hombres intentarán ver el mundo con ojos femeninos, al mismo tiempo que una mujer –la autora– explora la percepciĂłn masculina de la feminidad, en un doble proceso de “tomar el punto de vista del otro”.
“Me pareciĂł interesante proponer este juego –explica Balbi–, y para llevarlo a cabo y pensar cĂłmo construirĂan a una mujer estos hombres me tuve que ir un poco para atrás en el tiempo, porque ahora están más desdibujados los lĂmites entre gĂ©neros. En el espacio que construĂ, lo femenino y lo masculino está bien delimitado: los hombres escriben, las mujeres sĂłlo aman y ellos son los que escriben sobre ese amor. Pero cuando uno, que se comiĂł el diario Ăntimo de la mujer, repite todo eso, descubre una palabra que es mucho más poĂ©tica que la de los hombres.” En esta construcciĂłn de la feminidad, ambas producciones se embarcan en una tesis acerca de las diferencias de gĂ©nero. “Para mĂ lo femenino parte de una matriz: podemos crear vida”, expone Balbi. “La energĂa masculina –dice Wachtel– tiene que ver con el accionar, con lo impetuoso y tambiĂ©n con el intelecto, con lo racional; mientras que la femenina es más receptiva, siempre a la espera, propensa a la contenciĂłn y a cierto tipo de diálogo y de paciencia.”
Ambas directoras proponen, a su modo, reflexionar acerca de los roles sociales adoptados por cada género, pero no ya para establecer una rivalidad entre ambos, sino para pensarlos como opuestos complementarios. “La batalla por el poder nos pone en un callejón sin salida”, reflexiona Balbi. “La mujer tiene la posibilidad de dar vida, pero sola no puede, necesita un espermatozoide. Tiene la capacidad, pero no el poder. Tampoco lo tiene el hombre, porque si no tiene dónde engendrar tampoco puede. La sociedad nos ha confundido con esta rivalidad entre lo masculino y lo femenino. Mi obra no reivindica lo femenino ni tampoco la igualdad entre los sexos, porque lo que se reivindica es esta diferencia que hace que nos necesitemos, como complemento.”
En las dos producciones se abre el debate acerca de los distintos roles que la mujer fue ocupando a lo largo del tiempo y el lugar de la mujer hoy. “Nosotras hace poco que hemos logrado cierta igualdad –explica la directora de Informe...–, pero venimos de miles de años de no ser escuchadas. AsĂ que por más que yo no tengo este problema, es un conflicto ancestral.” Y en esta recuperaciĂłn del universo femenino de Ă©ste y otros tiempos, las teatristas pondrán en primer plano lo más Ăntimo y privado de la mujer. “Es interesante ver las reacciones del pĂşblico masculino viendo una propuesta femenina”, se rĂe Wachtel. “Con esta obra descubrĂ lo que piensan y sienten los hombres al acercarse a un mundo que desconocĂan: se sorprenden, quedan conmovidos, pasmados, hasta intimidados. Muchos me dijeron ¡quĂ© atrevida!, ¡quĂ© sexual! Por su parte, las mujeres se identifican y se emocionan”, relata. En esta sociedad en la que, segĂşn Balbi, “tanto hombres como mujeres deben dejar de lado su parte femenina, lo sensorial, lo más sensible, para funcionar”, ambas teatristas se animan a sacar a flor de piel todo el mundo interno de la mujer y sentirse realizadas con ello como profesionales y al mismo tiempo como representantes de su gĂ©nero. “Porque nosotras ya no le tenemos miedo a mostrarnos femeninas –afirma la autora de Informe demiurgo–, podemos ser independientes, trabajar, hacer obras de teatro y tambiĂ©n maquillarnos, ponernos tacos y mostrarnos lindas.”
Informe: Alina Mazzaferro.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.