Sábado, 26 de noviembre de 2005

En un momento de gran expectativa nacional e internacional alrededor de lo que alguna vez se llamó Nuevo Cine argentino, dos festivales se realizarán por estos días en la Costa, confirmando que los fotogramas siguen en movimiento. Por un lado, el Festival de Cine Independiente de Mar del Plata comienzó ayer su segunda edición con el compromiso de difundir películas que no tienen cabida en los circuitos habituales. La otra opción es la Semana Pantalla Pinamar 2005-2006, un espacio para la promoción de las producciones locales y europeas a realizarse en esa ciudad entre el 10 y el 17 de diciembre.
El evento de La Feliz se celebrará hasta el próximo 3 de diciembre, combinando documentales y obras de ficción con seminarios informativos y una retrospectiva dedicada al director argentino Alejandro Agresti. El jurado de la sección competitiva internacional de documentales estará integrado por el cineasta español José Luis Guerin –ganador de un premio Goya por el filme En construcción–, la directora checa Jana Bokova y la escritora colombiana Alexandra Cardona Restrepo.
Además se exhibirán fuera de competencia películas independientes de procedencia asiática, europea y latinoamericana, cuya entrada a la Argentina suele ser dificultosa. La sección “Desencuadres” reunirá films definidos a partir del riesgo artístico y la innovación, y en “Deja sonar la música” primarán obras abiertas a diferentes ritmos y sonidos. En otro de los apartados se hará un repaso a los mejores fan films inspirados por la saga de La guerra de las galaxias.
Paralelamente a todas las proyecciones, se realizarán seminarios orientados a estudiantes de cine y al público en general. Entre los temas a abordar, están la dirección de arte, la animación y la posproducción digital, la gestión de subsidios, la distribución y la nuevas tecnologías.
Un poco más cerca de fin de año, llegará el turno de la Semana Pantalla Pinamar 2005-2006, la segunda reunión cinematográfica argentino-europea luego de la exitosa convocatoria del año pasado, que estará organizada por el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) y la intendencia de la ciudad. Carlos Morelli, director de programación de la muestra, destacó el crecimiento de la inminente edición respecto de la primera, ya que se exhibirán 48 largometrajes en lugar de los 30 anteriores, y se agregarán las secciones “Selección raíces” y “La hora de los chicos”.
La semana se abrirá con el preestreno continental de Tapas, dirigida por los españoles José Corbacho y Juan Cruz, actual boom peninsular que cuenta con protagónicos de Angel de Andrés López (Las cosas del querer) y el veterano argentino Alberto de Mendoza. La sección “Y el ganador es...” concentrará a todos los largometrajes argentinos en 35mm estrenados o por estrenarse, con la condición de que en el último año hayan participado exitosamente en festivales internacionales de clase A. Incluirá también el voto del público y albergará los preestrenos de Garúa, de Gustavo Corrado; El buen destino, de Leonor Benedetto, y Monobloc, de Luis Ortega.
En “El vals del aniversario”, momento destinado a celebrar cumpleaños redondos, se podrá disfrutar trabajos como Lo que le pasó a Reynoso, de Leopoldo Torres Ríos (a 50 años de su estreno), y La Raulito, de Lautaro Murúa (30 años).
También habrá un espacio –“Hoy es mañana”– consagrado a preestrenar títulos argentinos y europeos a punto de ser comercializados en el país. En contraste, “Un día, un film” estará destinado a las obras del viejo continente que aún no tengan la distribución nacional asegurada. Este capítulo incluirá dos apartados: “Panorama del cine italiano” y “Ultimas imágenes bávaras”.
Las otras secciones del diagrama son “Lo mejor del Festival de Málaga” (el prestigioso certamen de cine español que, a su vez, programa películas argentinas vistas en Pinamar), “La noche americana”, “La mirada oriental” y “La película sorpresa”. Las nuevas propuestas que se presentan este año a quienes visiten Pinamar son la “Selección raíces” –que ofrecerá productos de las comunidades españolas autónomas de Cataluña y Galicia–, y “La hora de los chicos” –un recorrido por los interesantes aportes que se están haciendo en lo que refiere a producción fílmica orientada a la niñez–. Así que a no sorprenderse si en las playas veraniegas, además de choclo y panchos, se venden entradas para disfrutar del séptimo arte.

Informe: Facundo García.

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