Sábado, 6 de diciembre de 2003
Manuel Sadosky, un matem谩tico ilustre
Al maestro con cari帽o

Sadosky recibe de Finvarb la distinci贸n.
Por Guillermo Jaim Etcheverry *
(Palabras pronunciadas en el acto en homenaje al Dr. Manuel Sadosky declarado Ciudadano Ilustre por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires el 2 de diciembre de 2003)
La oportunidad de pronunciar unas pocas palabras en un acto de esta trascendencia constituye para m铆 un privilegio inesperado que me honra y que agradezco sinceramente.
La declaraci贸n del Doctor Manuel Sadosky como Ciudadano Ilustre por parte de la Legislatura de la Ciudad Aut贸noma de Buenos Aires representa el justificado reconocimiento de la ciudad a una de las figuras m谩s emblem谩ticas de su cultura. Don Manuel naci贸, se educ贸, trabaj贸 y, sobre todo, ense帽贸 en Buenos Aires, ciudad a la que ha estado ligado durante casi toda su vida.
Su historia personal es ampliamente conocida. Maestro Normal en 1931, Licenciado en F铆sico Matem谩tica en la Universidad de Buenos Aires en 1937, doctorado en 1940. Comienza entonces su labor docente que desarrolla hasta 1946 cuando viaja a Europa para perfeccionarse en matem谩tica aplicada, regresando al pa铆s en 1949. En 1956 regresa a la Universidad de Buenos Aires donde se desempe帽a como profesor de Matem谩tica en nuestra Facultad de Ciencias Exactas y Naturales. Durante el per铆odo que se extiende hasta 1966 desempe帽a un papel protag贸nico en las transformaciones de nuestra universidad que han hecho que ese per铆odo sea considerado como uno de los m谩s brillantes de su historia. Sadosky es entonces vicedecano de la Facultad de Ciencias Exactas, crea y dirige el Instituto de C谩lculo en 1960 y preside el Departamento de Pedagog铆a Universitaria, desde donde se ponen en pr谩ctica numerosas iniciativas innovadoras. Luego de la Noche de los Bastones Largos en 1966, viaja al Uruguay donde organiza el Instituto de C谩lculo de la Universidad de la Rep煤blica en Montevideo. En 1983, es convocado para desempe帽arse al frente de la Secretar铆a de Ciencia y T茅cnica, cargo que ocup贸 hasta 1989.
He preferido mencionar muy sucintamente la actuaci贸n acad茅mica del profesor Sadosky porque quisiera detenerme a considerar la significaci贸n de su figura que trasciende la simple enumeraci贸n de cargos, trabajos y distinciones. Quiero, en cambio, destacar la trascendente significaci贸n simb贸lica de su figura. Si correspondiera sintetizarla en una palabra, no dudar铆a en elegir la de maestro. Don Manuel es, antes que nada, un ejemplo de maestro. Y esa dedicaci贸n por el otro, ese inter茅s apasionado por los dem谩s se pone de manifiesto en la dimensi贸n esencialmente humana que es la de ser maestro. En todas sus intervenciones, en todos sus escritos, en todas sus opiniones se advierte esa preocupaci贸n por la educaci贸n, ese desvelo por la formaci贸n de los j贸venes.
Tambi茅n para la universidad argentina y para la de Buenos Aires en particular, Sadosky representa un s铆mbolo. El s铆mbolo de lo mejor que hemos podido ser y la fuente de inspiraci贸n y aliento para intentar reconquistar la confianza en que, como lo hicieron entonces quienes guiaron los destinos de la instituci贸n, es posible construir una universidad preocupada por la ense帽anza, centrada en la investigaci贸n, desvelada por la calidad de docentes y estudiantes.
Pero, por sobre todo, la actuaci贸n de Sadosky nos se帽ala que es preciso volver a generar una preocupaci贸n compartida por la universidad. Es en esa obsesi贸n com煤n donde coincidieron durante ese per铆odo personalidades de extracciones ideol贸gicas muy diferentes pero que compart铆an la pasi贸n por generar una atm贸sfera acad茅mica en la Argentina. La redacci贸n del Estatuto Universitario en 1958 fue un ejemplo de arm贸nica cooperaci贸n intelectual destinada a elaborar un marco normativo com煤n, que es el que rige en la actualidad. A prop贸sito de esta experiencia, don Manuel se帽ala que si bien Eduardo Braun Men茅ndez, otra figura descollante de la 茅poca, no participaba de muchas de las ideas que prevalecieron en la redacci贸n del Estatuto, fue 茅l quien pidi贸 un voto de aplauso para los redactores, considerando que la normalizaci贸n de la universidad era en s铆 misma un gran avance. Es que, como dice el mismo Sadosky, 鈥渆l centro de gravedad de la vida de aquellas personas era la universidad鈥. Y a prop贸sito de Braun Men茅ndez, afirma: 鈥淎 alguna gente de la Universidad le resultaba extra帽a la relaci贸n que hab铆amos establecido, pero lo que nos vincul贸 fue la pasi贸n con que un n煤mero apreciable de personas, graduados y estudiantes, contribu铆amos a hacer una nueva universidad. Eduardo Braun Men茅ndez 鈥揷oncluye鈥 fue uno de los hombres m谩s excepcionales que he conocido鈥.
Creo que esas palabras encierran la verdadera lecci贸n de grandeza que nos da la trayectoria de don Manuel a quien hoy honramos. La del maestro militante en todos los campos en los que le correspondi贸 actuar. Ese ejemplo es el que hoy debemos rescatar. Cuando la discusi贸n sobre la sustancia de nuestra acci贸n universitaria parece secundaria, cuando s贸lo parece preocuparnos el r茅dito econ贸mico o la protecci贸n de posiciones o privilegios de grupos o personas, el tener junto a nosotros figuras como la que hoy honramos deber铆a hacernos avergonzar, porque dejan en evidencia lo peque帽o de nuestras ambiciones, lo corto de nuestras miradas.
Ciudadano Sadosky: gracias por sus empecinadas lecciones de valor c铆vico y por su permanente ejemplo de apasionada preocupaci贸n por nuestro destino com煤n, tan indisolublemente ligado a la educaci贸n. Por esas lecciones, por ese ejemplo de vida, es grande. Por eso es y seguir谩 siendo, ilustre.
* Rector de la Universidad de Buenos Aires.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.