Tras los muros, sordos ruidos

Como suele suceder en acontecimientos deportivos de esta magnitud, el marco superó al espectáculo. Del otro lado de las alambradas en este popular circuito callejero de la capital santafesina, público suficiente como para completar un centenar de miles de espectadores entre la carrera nocturna del sábado a la noche y ésta, más aplacada, menos interesante, de ayer. Del otro lado, un tren turístico compuesto por una treintena de autos de TC 2000, finos exponentes técnicos de 310 HP conducidos por pilotos que, en general y para desazón, nunca se sacudieron la cautela de encima.

Así salió lo que salió, una prueba con algunos golpes de escena, que poco tuvieron que ver con la emoción del automovilismo. Y de todo eso sacó partido Emiliano Spataro, que largaba en pole y logró su quinto triunfo en 99 carreras en TC 2000. Ni el subcampeón Leonel Pernía, ni el sorprendente Fabián Yannantuoni, que lo persiguieron durante más de media hora, se animaron a poner en duda su liderazgo. La chance de romper el auto en cualquier maniobra arriesgada es más limitante en circuitos como éste que en cualquier otro.

No le vino nada mal esta victoria a Spataro, que había ganado la prueba nocturna santafesina de 2010 siete meses atrás, y es de los que más conocen este peculiar trazado. Fue su respuesta a la amenaza que representa la incorporación al equipo Fiat, para este año, de cinco títulos de TC 2000 encarnados por Gabriel Ponce de León (3) y José María López (2). El piloto de Lanús subió al podio en las dos carreras de este largo fin de semana y está quinto en el torneo, con 31 puntos; Ponce de León, que terminó 20º, tiene 9; López, que ni corrió, ninguno. Hasta la octava carrera del año (y el campeonato tiene 129) no habrá órdenes de equipo...

“La carrera no la disfruté tanto porque no la pude manejar a gusto”, afirmó Spataro. “Con Gabriel y con Pechito tengo una buena relación. Pensé que con alguno de ellos podía ser más complicada.” Pernía estrenaba nuevas líneas aerodinámicas en su Honda Petrobras y explicó que no quiso arriesgar “porque el equipo tuvo que traer desde Córdoba nuevas parrillas de suspensión, el viernes a la noche, después de lo que yo había golpeado el auto en la chicana”.

Yannantuoni resistió con éxito los embates de Rossi después de que Werner lo tocara en una maniobra discutida. “Se tiró donde no había lugar para pasar”, relató el piloto del equipo YPF Ford, que saltó al segundo lugar del torneo, detrás de su compañero Juan Manuel Silva. El chaqueño se quedó parado en la largada con un problema de embrague, pasó último tras un toque con Larrauri, y trepó hasta el 12º puesto final. El campeón Norberto Fontana enderezó el fin de semana con un séptimo lugar.

Rossi, otro gran candidato al título, también eligió sumar a arriesgar, y llegó delante de Altuna, ganador de la carrera nocturna y también escolta de Silva en la tabla. Ahora hay cuatro pilotos al tope del torneo separados por apenas 3,5 puntos. Premio consuelo para un espectáculo que, como relleno de la celebración popular, dejó que desear.

La Carrera

TC 2000. 2ª fecha,

Santa Fe. 24 vueltas, 72,480 km.

Promedio del ganador: 117,643 km/h.

Record de vuelta: Rossi, en la 6ª, 1m18s139, a 139,137 km/h.

Campeonato: Silva, 41 puntos; Altuna, Yannantuoni, 39; Rossi, 38,5; Spataro, 31; Pernía, 29,5, Muñoz Marchesi, 28.

Próxima carrera: 1º de mayo en San Martín (Mendoza).

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