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Una tragedia familiar se abatió en la madrugada de ayer sobre una vivienda de barrio Bella Vista, y culminó con tres niños impactados por una situación de extrema violencia en la que estuvieron a punto de perecer.

Ocurrió en Valparaíso 1951, una casa situada en el confín de esa calle, detrás del cementerio de disidentes y de la estación transformadora de la Empresa Provincial de la Energía ubicada sobre avenida Pellegrini al 4200. Los vecinos reportaron a la policía que hacia las tres y media de la madrugada empezaron a escucharse gritos como los que a menudo proferían Dardo Boasso y su compañera, Carolina Soledad N., ambos de 35 años. La disputa llegó al punto de que el hombre avanzó con un cuchillo hacia la habitación donde ya se habían despertado los tres hijos de la mujer: un varón de 10 años y dos nenas de 7 y 5.

La madre de los niños, al ver la amenaza inminente de su concubino armado contra sus hijos, se abalanzó sobre él y se trabó en un forcejeo hasta arrebatarle el cuchillo. Y en ese fragor la mujer le hundió a Boasso el cuchillo en el pecho más de una vez, según revelaron ayer desde el Ministerio Público de la Acusación.

Médicos del Sies atendieron a Boasso en la escena de la pelea, pero la gravedad de las heridas hizo que muriera antes de que fuera trasladado al hospital de emergencias. El fiscal de Homicidios Luis Schiappa Pietra dispuso que la mujer quedara detenida en la comisaría 13ª. Los niños, en tanto, fueron reintegrados a su padre biológico.

Mató al marido para salvar a sus tres hijos

Una noche de locura definitiva