Cuando en 2002 Gabriel Oviedo fund贸 el portal SentidoG.com, las empresas que hab铆an apostado a Internet como un negocio en el pa铆s hab铆an ca铆do con un estr茅pito similar al que provoc贸 la crisis de aquellos d铆as, porque el futuro virtual al que apostaban parec铆a mucho m谩s lejano. En el 谩mbito lgtb, por ejemplo, la multinacional Gay.com hab铆a abierto una franquicia argentina que era mucho peor que la estadounidense, m谩s mis贸gina y clasista, con nula relaci贸n con el activismo, y que cay贸 al poco tiempo. SentidoG naci贸 como el ap茅ndice de un programa de radio, pero despu茅s se independiz贸 como sitio web y perfil贸 su personalidad como espacio aglutinador de noticias. Frente al desconcierto que la crisis hab铆a abierto en la vida de los argentinos reci茅n comenzado el nuevo milenio, Internet era al mismo tiempo un salvoconducto y un laberinto, esas mismas caracter铆sticas fueron las que les imprimi贸 Oviedo a SentidoG desde el principio; y por eso el sitio fue instalado como sin贸nimo de la nueva cultura digital lgbtiq. A veces perdido en su propio laberinto ideol贸gico, encontrando alguna vez alguna salida oportuna, la informaci贸n que brindaba el sitio era un collage mayormente extra铆do de otras fuentes digitales, haciendo del hiperv铆nculo su raz贸n de ser: SentidoG ayud贸 a multiplicar ideas que circulaban, sin rigor estricto pero con constancia. Esa falta de centro a veces jugaba a favor, otras no tanto, pero tal vez se pareci贸 a la forma un poco desordenada con que circula la informaci贸n en una red social o en los blogs, antes de que estos artefactos de la vida en Internet se pusieran de moda. Tambi茅n hay que reconocer que, antes que algunos medios comenzaran a cubrir con regularidad los eventos de la comunidad lgbtiq sin tratarlos como mera excepci贸n pintoresca, SentidoG era un aliado frecuente, y a veces 煤nico testigo de momentos puntuales del activismo local. De hecho, en la primera mitad de los 2000, cuando todav铆a 茅ramos una cantidad m谩s bien reducida de activistas, recuerdo la presencia constante de Oviedo como 煤nico cronista en momentos clave. O, mejor dicho, cronista y fot贸grafo, porque SentidoG era en ese tiempo, y en gran parte de su historia, un artificio sostenido por la solitaria mirada insistente de Oviedo, con todas las dificultades que eso implica. Si crecimos como comunidad, en n煤mero de personas visibles y comprometidas, SentidoG tambi茅n se expandi贸, sum贸 colaboradores y una suerte de comunidad que con el tiempo form贸 Oviedo a trav茅s del sitio que mezclaba el mercado cada vez m谩s expansivo de la cultura lgbtiq con la pol铆tica, el activismo y la cultura. El 28 de junio del a帽o pasado, el D铆a del Orgullo internacional, Gabriel Oviedo organiz贸 una entrega de premios para celebrar la primera d茅cada de SentidoG. La fiesta fue un verdadero desfile de diversidad que pocos eventos logran convocar en estos tiempos, y por eso fue una verdadera postal del valor que aport贸 Gabriel, alguien que abri贸 un espacio para que dentro y fuera de la comunidad lgtbiq haya m谩s movimiento e intercambio de ideas.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.