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Viernes, 5 de febrero de 2016
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a la vista

No alcanza con ser travesti

Mara P茅rez Reynoso o la no tan incre铆ble historia de la funcionaria trans y militante mendocina pro-discurso transf贸bico.

Por Claudia V谩squez Haro
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La reciente designaci贸n de Mara P茅rez Reynoso, mujer trans, militante del PRO, como Coordinadora Nacional de Diversidad del Ministerio de Seguridad de la Naci贸n, por la Ministra Patricia Bullrich, dispar贸 el debate en las redes sociales y genera preocupaci贸n en las integrantes de nuestro colectivo. Pensar esto como sin贸nimo de inclusi贸n est谩 lejos de ser verdad en t茅rminos reales y concretos. Sabemos que detr谩s de estas decisiones se esconden cuestiones profundamente ideol贸gicas/ pol铆ticas.

Mientras el gobierno macrista muestra a 鈥渓a primera trans funcionaria en ocupar un cargo en el Estado Nacional鈥, invisibiliza a m谩s de un 95% de nuestra comunidad, que vive en condiciones de extrema vulnerabilidad. Si tenemos en cuenta el contexto pol铆tico actual, sumado a la criminalizaci贸n de la protesta social, dicho nombramiento no es azaroso, le confiere inteligibilidad y enga帽a haciendo creer que por ser trans las decisiones que tome ser谩n en favor de nuestra comunidad. Basta recordar la decisi贸n de la vicepresidenta de la Naci贸n Gabriela Michetti, que siendo una persona con discapacidad, no respet贸 la ley de cupo laboral y despidi贸 a m谩s de un centenar de trabajadores discapacitados del Senado de la Naci贸n. Enceguecida por su af谩n revanchista, y bajo el discurso de 鈥渓os 帽oquis鈥, dej贸 sin trabajo a alrededor de dos mil personas.

Enemiga 铆ntima

El pensamiento de Mara representa el discurso conservador de la derecha m谩s recalcitrante argentina, basado en la doble moral, las buenas costumbres y la clase. Me pregunto: 驴va a ense帽ar a integrantes de las fuerzas de seguridad a no reprimir y dejar de perseguir a las compa帽eras trans que se encuentran en situaci贸n de prostituci贸n? 驴O a disciplinarnos cuando salgamos a la calle para defender nuestros derechos? En una entrevista que le hizo Nelson Castro, por el proyecto presentado por Mar铆a Rachid sobre la reparaci贸n para las personas trans mayores de 40 a帽os, dijo: 鈥淓n calidad de vicepresidente de la Uni贸n PRO Diversidad, nos oponemos al subsidio. El kirchnerismo a trav茅s de estos planes termina con la cultura del trabajo鈥. Tambi茅n los denomin贸 鈥減lanes descansar鈥. Y al mejor estilo del manual de Dur谩n Barba 鈥搖tilizado en campa帽a por los candidatos de Cambiemos鈥 empez贸 a dar nombres de personas que nadie conoce, y que no importa si existen. Adem谩s, habl贸 en nombre de todas sin consultarnos, desconociendo nuestros modos de organizaci贸n social y acci贸n pol铆tica.

Cabe recordar que en Argentina existen desde hace m谩s de 25 a帽os organizaciones de la sociedad civil de personas trans que luchamos por la inclusi贸n social y la no discriminaci贸n por cuestiones de orientaci贸n sexual, identidad y /o expresi贸n de g茅nero como: ATTTA, ALITT, Futuro Transgen茅rico, MAL, OTRANS, entre otras. El proyecto aludido buscaba reparar en t茅rminos pecuniarios a personas trans mayores de 40 a帽os, que han visto casi toda su vida al Estado violar sus derechos. Seg煤n los estudios realizados en el 2005 y 2007 publicados en los libros La gesta del nombre propio y Cumbia, copeteo y l谩grimas (compilados por Lohana Berkins), la expectativa de vida de las integrantes de nuestro colectivo es de 35 a帽os, por la falta de acceso a derechos b谩sicos como la educaci贸n, salud, trabajo, vivienda, entre otros. Quienes pasamos esa barrera, somos consideradas sobrevivientes de este sistema nefasto que excluye, discrimina, estigmatiza, y termina con nuestras vidas. A ese sistema Mara P茅rez Reynoso le es funcional.

El objetivo era claro: con tal de defenestrar al kirchnerismo, no le import贸 el estado de extrema vulnerabilidad en el que vive la mayor铆a de las personas trans. Descontextualiz贸 la idea principal del proyecto, e intent贸 deshistorizar nuestra historia de lucha. La hist贸rica referente Lohana Berkins, al escuchar este tipo de declaraciones coment贸: 鈥淓stas nenitas nacidas en democracia, desconocen la historia de nuestro movimiento鈥. El cual hoy es considerado por organizaciones de otros pa铆ses como uno de los m谩s combativos y organizados del mundo.

Prostituci贸n no es destino

Mara tambi茅n ha llegado a plantear a la prostituci贸n como 鈥渓a salida laboral f谩cil鈥. Desconoce las m煤ltiples causas que hacen que las compa帽eras se encuentren en estado de prostituci贸n. Apela a dos casos que conoce, el de una peluquera y otra modista, para explicar que se puede hacer otra cosa que no sea la prostituci贸n. Con esos ejemplos intenta dar respuesta y se desentiende de la problem谩tica en s铆. Argentina es abolicionista en relaci贸n a la prostituci贸n, no la proh铆be, ni la regula. Generar distinci贸n entre las que se prostituyen y las que no, es una divisi贸n tendenciosa. Sabemos bien c贸mo opera el estigma y la doble moral, incluso dentro del mismo colectivo. Ac谩 desaparece autom谩ticamente la responsabilidad del Estado, y como una especie de transferencia se traslada la discusi贸n entre un grupo y otro. Acu帽ando la responsabilidad de nuestros destinos en t茅rminos individuales. As铆 el poder muestra una de sus caras m谩s perversas, bajo el conocido dicho divide y reinar谩s. Esta pr谩ctica se naturaliza, y no permite reflexionar cr铆ticamente sobre la prostituci贸n como una imposici贸n cultural avalada por los Estados y mercados. Los cuales atraviesan nuestros cuerpos y los convierten en mercanc铆a que pude salir a la venta en t茅rminos de oferta y demanda.

Este tipo de pensamiento alimenta al imaginario social que han instalado los medios de comunicaci贸n a trav茅s de sus representaciones sobre nosotras, asociando la identidad de g茅nero con la prostituci贸n. As铆 se refuerza un discurso de orden, que nos criminaliza y estigmatiza.

Mara sostiene que 鈥渁 veces es necesario poner un poco de empe帽o鈥 para conseguir un trabajo que no sea la prostituci贸n, como si todo pasara por los esfuerzos individuales y no colectivos. Una mirada neoliberal e individualista, intenta simplificar y desconocer la discriminaci贸n que viven las compa帽eras a la hora de buscar un trabajo formal.

En esta lectura reduccionista hay otras cuestiones que se ponen en juego, y que se intenta invisibilizar, como la contenci贸n familiar, amigxs, compa帽erxs de militancia, pero por sobre todas las cosas una decisi贸n profundamente pol铆tica. Es decir, sin los Derechos Humanos como pol铆tica de Estado desde el 2003 al 2015, nada de esto hubiera sido posible. Hubo un gobierno que nos escuch贸 y materializ贸 en leyes nuestros reclamos de las organizaciones de la diversidad sexo/gen茅rica. Los logros no son solo personales, sino el resultado de esfuerzos colectivos.

Tacos altos en el barro

En la militancia de la diversidad sexo/gen茅rica, no se conoce a Mara P茅rez Reynoso. Todas las trans militantes reconocidas, provienen del campo popular. Con experiencias vitales de situaciones l铆mite. Sobrevivientes de los c贸digos de falta o edictos policiales, que criminalizaban las identidades trans (travestis, transexuales y transg茅neros). Esos saberes no los aprendimos en ninguna universidad, sino en las calles, en el barro. Muchas de nosotras hab铆amos sido expulsadas de todas las instituciones, incluso de nuestras familias, de ah铆 el concepto de nacer en el territorio enemigo.

El activismo en Argentina surge ante la imposibilidad de transitar libremente por la v铆a p煤blica, las detenciones arbitrarias y un latente estado de sitio. Se me vienen a la memoria los nombres de Nadia Echaz煤, Claudia P铆a Baudracco y Diana Amancay Sacay谩n, militantes del campo popular que dieron la pelea desde y en las calles, pusieron el cuerpo y sus vidas para que hoy nosotras podamos vivir en un pa铆s mucho m谩s igualitario. Rodolfo Walsh sosten铆a que las clases dominantes han procurado siempre que los pueblos no tengan memoria, no tengan historia. As铆 cada lucha debe empezar de nuevo. Pero nosotras seguimos militando y mantenemos viva la memoria de nuestro colectivo, luchamos por una Patria libre, justa y soberana. La historia escrita por vencedores no pudo y ni podr谩 hacer callar nuestras voces.

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