La alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, aseguró ayer que vigilará el respeto de los derechos humanos en Brasil tras el triunfo del ultraderechista Jair Bolsonaro en las elecciones presidenciales. “Como oficina vamos a estar muy atentos porque queremos que en una democracia tan importante de América latina los derechos humanos se sigan respetando y la democracia siga consolidándose”, indicó la ex presidenta chilena y lamentó, sin nombrarlo, que mayorías elijan a políticos con discursos homofóbicos, misóginos y que sostienen que la tortura está bien para obtener información.