El 11 de junio pasado la tranquilidad en Puerto Madero se quebró cuando los transeúntes divisaron que una persona trepaba una de las torres que allí se levantan. Un llamado al 911 alertó a bomberos, policía y el SAME que organizó un operativo para bajarlo del piso 28. Al descender fue detenido. Se trataba del influencer polaco Marcin Banot que se arriesgaba a una condena de dos años de prisión. Ni lerdo ni perezoso, pagó el costo del operativo, en sus redes sociales pidió perdón por “el grave error” cometido y se largó de la Argentina a la que no puede regresar por tres años.