“Agradecé que estoy en cana. ¡Montoneros hijos de puta!”. Las amenazas y los insultos partieron de boca de dos genocidas condenados por delitos de lesa humanidad en Mendoza, que están además siendo juzgados en el Juicio Departamento de Informaciones de la policía provincial. Julio La Paz Calderón y Armando Fernández (apropiador de la nieta 127, hija de María del Carmen Moyano y Carlos Poblete) se cruzaron con familiares de víctimas del terrorismo de Estado mientras esperaban los autos que debían llevarlos hasta sus casas. Allí cumplen prisión domiciliaria.