En una región costera al sur de Copenhague, un hallazgo inesperado sorprendió al mundo de la paleontología. Un aficionado descubrió lo que resultó ser vómito fosilizado de hace 66 millones de años. Los científicos confirmaron que se trataba de restos de lirios de mar que habían sido ingeridos y luego regurgitados por un pez de la era Cretácica. Este vómito fosilizado tiene un valor incalculable para los científicos, quienes aseguran que los fósiles de heces y vómitos de animales prehistóricos, conocidos como bromalitos, pueden ofrecer detalles esenciales sobre las redes alimentarias del pasado.