El Gobierno oficializó la suba en energía y gas. Entidades de consumidores advierten sobre las mediciones a precio dólar.
En medio de la recesión económica, se esperan diferentes incrementos en los servicios más utilizados por los argentinos.
El Gobierno nacional elevó de 6,6 a 6,8 por ciento la alícuota del impuesto que pesa sobre la factura de gas para financiar el subsidio que se otorga a zonas frías.
Mientras las paritarias están planchadas y el consumo se resiente, la gestión libertaria achica aún más los ingresos con incrementos en servicios esenciales.
Desde la Unión de Usuarios y Consumidores alertaron acerca de las malas prácticas generalizadas de cobro de las empresas para intentar solucionar sus problemas económicos. Entre el error y la ilegalidad, qué hacer si la factura que llega es exorbitante.