Boca lo ganó a lo Boca, con un hombre menos, por la temprana expulsión de Somoza, y por un gol de rebote de Ledesma, cuando Pérez intentó despejar un rebote de Campestrini ante un remate de Riquelme, y otro de Sánchez Miño, en un contraataque. La victoria dejó al equipo de Falcioni muy cerca de la clasificación a los octavos de final. Boca suma siete unidades y está segundo en el Grupo 4, detrás de Fluminense, que lidera con nueve y anoche jugaba ante Zamora, último con una unidad. El equipo de Alfaro, en cambio, sumó su tercera derrota en la Copa.

Arsenal comenzó a tomar confianza con una buena escapada de Carbonero, que finalmente desperdició llevándose la pelota por delante. Después logró llegar a Orion con una jugada de tiro libre y con una avivada de Córdoba. Boca se fue ordenando lentamente hasta que consiguió poner freno al dominio rival, cuando pasados los primeros diez minutos apareció Riquelme para encender las luces del equipo con un remate al arco.

La tribuna local levantó el volumen tras la mejor jugada colectiva de Boca, a los 20 minutos, una pelota que robó Clemente y que terminó en centro al corazón del área de Mouche, corajeada de Silva incluida, un rebote y un remate desde afuera de Riquelme. Arsenal ya no era el del comienzo, sin embargo, en la primera oportunidad que tuvo llegó con un cabezazo de Burdisso.

En la medida en que Boca iba bajando su rendimiento, el árbitro Loustau ganaba protagonismo volviéndose foco de los reproches por parte del público boquense, que le cuestionaba prácticamente todos los fallos, pero sobre todos los divididos que caían para el lado de la visita. Mouche jugaba solo y no las terminaba bien. Silva pivoteaba pero no resolvía. Y el asunto se le terminó de complicar cuando el árbitro le mostró la segunda amarilla a Somoza, por una falta sobre Carbonero.

Alfaro buscó aprovechar el hombre de más con el ingreso de Ortiz por Marcone. Pero los papeles se le quemaron rápido. A los 51 minutos, Silva dominó la pelota y se la cedió de taco a Riquelme, que sacó un remate al arco, que Campestrini no logró contener y que Ledesma, otra vez salvador como en Sarandí, fue a pelear de arremetida ante Pérez, quien rechazó, pero Ledesma alcanzó a poner el pie y convertir.

Boca estaba firme atrás. Los defensores se esforzaban para disimular la ausencia de Somoza, y eso reducía las chances de los visitantes a las jugadas de pelota parada. Estuvo cerca Leguizamón, con un remate de tiro libre, pero Orion tapó el remate y Silva terminó llevándose la pelota para despejarla. Y Burdisso estuvo también cerca con un buen cabezazo.

Arsenal se adelantó unos metros y comenzó a llegar con cierta facilidad hasta Orion, entonces Falcioni mandó a la cancha a Sánchez Miño, por Mouche, para intentar compensar en juego en la zona de volantes.

Y en un contraataque, Silva dominó la pelota de espaldas al arco, se dio vuelta y habilitó al ingresado Sánchez Miño, quien definió cruzado para poner el 2-0 final.