“Venimos siguiendo todos los sectores sensibles, como el de los electrodomésticos, el automotriz y el textil, en coordinación con Trabajo y la Secretaría de Industria y en contacto con sindicatos y cámaras empresarias. Algún sector requerirá políticas activas del Estado a partir del superávit fiscal.” El jefe de Gabinete, Sergio Massa, confirmó ayer de ese modo que el Gobierno evalúa auxiliar a los sectores que vieron restringida su demanda a raíz de la crisis internacional, aunque no dio detalles ni sobre el monto que tienen pensado destinar ni sobre la manera en que intervendrán. Algunos funcionarios del Gobierno, más permeables al lobby industrial, pugnan para que se les otorguen subsidios a los empresarios y evitar así que éstos despidan trabajadores. Sin embargo, otros propusieron destinar los recursos públicos para incentivar la demanda local y de ese modo evitar que la actividad económica se desacelere. Esta alternativa finalmente habría sido la elegida.

PáginaI12 reveló ayer que una de las alternativas que evalúa el Ejecutivo es lanzar líneas de crédito a tasas de interés de un dígito destinadas a la compra de bienes de los sectores en los que se están detectando mayores conflictos laborales: industria automotriz, electrodomésticos, productos electrónicos y textiles. Salvo en el caso de los vehículos, en el resto de los sectores los préstamos serán para bienes de producción nacional. La propuesta es hacerlo vía fideicomisos de la Anses. La intención es que los consumidores se vean tentados por los planes de pago y gasten en los sectores en que se corre peligro de perder fuentes de trabajo.

La alternativa es la que propusieron los industriales que piden subsidios para sus empresas no despidan trabajadores. Esa alternativa tiene algunos adeptos dentro del Gobierno, pero todo hace prever que la decisión de la Presidenta será subsidiar la demanda en lugar de la oferta para reactivar una economía que en los últimos meses ha comenzado a enfriarse.

Ayer, por ejemplo, la Cámara del Comercio Automotor informó que en octubre la venta de autos usados cayó 4 por ciento, respecto del mismo mes del año pasado, aunque en el acumulado de los diez primeros meses del año todavía mantiene un crecimiento de 7 por ciento en relación con igual lapso de 2007. La venta de electrodomésticos también se frenó. En las principales cadenas comerciales del rubro, en el Día de la Madre se vendió muy por debajo de las expectativas empresarias y desde entonces la actividad siguió cayendo. La intención oficial es salir a jugar fuerte con parte de los recursos del superávit fiscal para operar de manera contracíclica y evitar que la recesión, que actualmente se expande en Europa y Estados Unidos, llegue a la Argentina.