El presidente de Federación Agraria, Eduardo Buzzi, cuestionó ayer con dureza al titular de la Sociedad Rural, Hugo Biolcati, por las declaraciones en las que cuestionó a los votantes del Frente para la Victoria. “Cuando uno cumple roles dirigenciales, hay que ser muy cuidadoso con las palabras que se dicen. Ha logrado unificar a todo el arco agropecuario en repudio a estos dichos. Yo me sumo a ese repudio. Creo que está mal, y que Biolcati muestra la realidad de su esencia sin ningún maquillaje. Tuvo un acto de sincericidio”, sostuvo el federado. Pese a compartir la Mesa de Enlace, y haber sido el primer presidente en la historia de Federación Agraria en asistir al corte de cintas y a la inauguración de la Exposición de Palermo organizada por la Sociedad Rural en varias oportunidades, Buzzi buscó diferenciarse de su socio. “Yo no pienso lo mismo que Biolcati. Yo quiero despegarme de esa situación.”

El jueves pasado, Biolcati participó como invitado principal en los desayunos de trabajo de la Asociación de Dirigentes de Empresa. Allí se sintió en confianza y criticó el voto de la población rural que en 2008 protagonizó la resistencia contra la resolución 125. “Esa gente votó a Cristina, esa gente a la que no le importa que aparezcan casos como el de Schocklender, ni que haya inseguridad. Sólo le importa pagar el plasma. Encima aparece Zaffaroni explicando que él no sabía que había prostíbulos en sus departamentos, pero a nadie se le ocurre preguntar cómo es que tiene 17 departamentos un juez de la Corte con lo que gana. A la gente en el interior no le va mal. Mira el programa de Tinelli y si puede pagar el plasma, no le importa nada más.”

El titular de la Sociedad Rural recibió críticas de diversos sectores sociales y políticos e incluso de la propia dirigencia rural. Uno de los primeros pares que lo cuestionó fue el presidente de la Sociedad Rural de Córdoba, Eduardo Ballesteros. “No podemos menospreciar a la gente”, advirtió. Luego fue el turno del máximo dirigente de la Sociedad Rural de Morteros, Ider Peretti. “El verdadero campo y los productores que trabajan diariamente en las cosechas son conscientes de los buenos precios y de la rentabilidad que reciben. Hace diez años andaban en tractores y camionetas antiguas, y ahora tienen maquinaria de última generación”, agregó.

Buzzi prefirió esperar un poco más y recién ayer habló sobre el tema en radio Mitre. “La Federación Agraria ha visto esto con mucho desagrado, porque hay que respetar la voluntad popular”, resaltó. Si bien reconoció que “nadie creía de los dirigentes agrarios semejante apoyo a Cristina Fernández”, subrayó que “es contundente” el respaldo que cosechó la jefa de Estado, incluso “en zonas rurales de todo el país”. “La ruralidad le ha dado un aval a la Presidenta. Por lo tanto no se puede objetar ni descalificar semejante realidad, hay que aceptarla, ver cómo nos paramos frente a esto, y cómo reinstalamos los problemas que permanecen entre los productores”, planteó. De lo contrario, alegó Buzzi, la sociedad vería a la dirigencia agropecuaria como “intolerante” o “directamente no tendríamos la comprensión que estamos necesitando para que efectivamente podamos seguir reclamando por los problemas que no se han resuelto”.

El término “ruralidad” no es casual, pues es la manera que utilizó Buzzi para poner en duda que “el campo” haya apoyado a Cristina. Según su teoría, “el campo” vendrían a ser los sojeros y “la ruralidad”, quienes viven en los pueblos rurales, pero se desempeñan en otras actividades. Esa afirmación es difícil de refutar mostrando los resultados de las mesas rurales porque, obviamente, los votos en las escuelas rurales no aparecen discriminados entre “campo” y “ruralidad”, pero varios encuestadores le restaron crédito a ese análisis.

El titular de Federación Agraria ya se había enfrentado en los últimos meses con Hugo Biolcati. El 24 de marzo de este año, cuando se conmemoraba un nuevo aniversario del golpe de Estado de 1976, Buzzi también se diferenció de la Sociedad Rural. “Ellos pusieron los funcionarios y nosotros, los exiliados y los muertos”, declaró. No obstante, esas diferencias no le impidieron hasta ahora articular políticas con la entidad que preside Biolcati. Ante interlocutores críticos de la Mesa de Enlace, siempre se mostró con un pie afuera de ese espacio, pero nunca rompió la alianza. Algunos chacareros lo cuestionan no sólo por haber sostenido esa alianza contra viento y marea sino, también, por haber aplaudido los discursos de Biolcati estos últimos años, sentado en la tribuna principal de la Exposición Rural.